Dos imágenes sacadas por la sonda solar Orbiter revelan el impactante cambio que ha tenido el sol en solo dos años. ¿Por qué cambió tanto y cómo nos afecta?

El cambio que ha sufrido el sol en un lapso de 2 años es radical. En febrero de 2021 se ve un sol tranquilo, mientras que la fotografía sacada en octubre de 2023 muestra un sol lleno de manchas y erupciones.

Las imágenes fueron tomadas por el instrumento EUI (Extreme Ultraviolet Imager) del Solar Orbiter y revelan la atmósfera superior del cuerpo celeste, que tiene una temperatura de alrededor de un millón de grados Celsius.

El EUI ayuda a los científicos a investigar los misteriosos procesos de calentamiento que tienen lugar en las regiones exteriores del sol. Dado que el EUI observa la estrella en luz ultravioleta, que es invisible a los ojos humanos, el color amarillo se añade para ayudarnos a visualizar nuestro sol cambiante.

• Imagen tomada en febrero de 2021 por el instrumento EUI del Solar Orbiter

• Imagen tomada en octubre de 2023 por el instrumento EUI del Solar Orbiter

Pero ¿Por qué sucede esto?

El Sol atraviesa un ciclo de actividad que dura cerca de 11 años y es causado por la "dinamo solar", el proceso que genera el campo magnético del astro. Al principio de este ciclo, el mínimo solar, hay relativamente poca actividad y pocas manchas solares. La actividad aumenta de forma constante hasta alcanzar su punto máximo, llamado el máximo solar y luego vuelve a disminuir poco a poco hasta llegar al mínimo.

El mínimo solar más reciente se produjo en diciembre de 2019, apenas dos meses antes del lanzamiento de Solar Orbiter. Las primeras vistas de la nave espacial mostraron que en febrero de 2021 el cuerpo celeste aún estaba relativamente en calma.

Ahora que la actividad solar se acerca a su máximo, que se espera para 2025, las imágenes más recientes de Solar Orbiter, tomadas durante una aproximación al Sol en octubre de 2023 muestran un aumento sorprendente de la actividad.

¿Es peligroso para la Tierra?

Solar Orbiter ayudará a predecir el calendario y la intensidad de los ciclos solares lo que es vital porque la actividad solar puede afectar gravemente a la vida en la Tierra; las erupciones extremas pueden dañar las redes eléctricas terrestres e inutilizar los satélites en órbita.