Una miniserie que unen el montañismo, la historia y los testimonios en primera persona de las primeras expediciones realizadas en Chile.

En el segundo capítulo de “La Montaña Imaginaria”, llamado “Everest 1953-1983”, los montañistas chilenos nos cuentan cómo fueron las primeras expediciones al Everest.

Jorge Quinteros, realizó la expedición al Everest en 1992, cuenta que: “El hombre hasta el momento no había llegado a los 8 000 meses para empezar. Y lo más alto era el Nanda Devi, que está en la India. Y había sido conquistado por Harold Tilman. Y la expedición que hicimos, que fue la primera travesía a los Campos de Hielo y la hice con él. Entonces, está muy ligado a la historia, hasta que un día se conquistó el Everest. Después de una gran historia también. Una epopeya…”

“Gracias a que Edward Whymper sube el Matterhorn y otros más, se creó este deporte. Que no era un deporte. Los primero que subían montañas lo hacían por motivos religiosos algunos pensaban que había algún tipo de deidad algún tipo un ser superior ahí arriba o en realidad no sabían muy bien qué había y querían ver y hacer un homenaje a entidades superiores allá, sacrificios también”, explica Álvaro Vivanco, Presidente Club Alemán Andino de Santiago.

“Con el tiempo, exploradores empezaron a descubrir el resto del mundo. Exploradores europeos, quiero decir, y se dieron cuenta que también existían zonas montañosas importantes, mucho más grandes que los Alpes, algunas de ellas, como los Himalaya. Así bautizaron a varias de ellas. Lamentablemente, el Everest fue el que recibió el peor de los nombres, recibió el nombre de un británico que nunca estuvo ahí, creo que Everest ni siquiera vio el cerro”, agrega Álvaro Vivanco.  

Una de las expediciones más famosas que hizo fue la del año 1924, donde George Mallory acompañado de Irvine no vuelve: “En la década de los 20 se realizaran, según recuerdo, tres grandes expediciones serias al Everest, para intentar subirlo. La más famosa de estas expediciones es la última, creo, del año 24, donde participa George Mallory que va acompañado de Irvine y no vuelven. La expedición se hizo famosa por varias razones. Mallory ya era considerado uno de los mejores montañistas del momento. Era un tipo, por lo menos en el ambiente de la montaña conocido y que tenía cierta fama. Después él, en una charla, le preguntaron por su motivación para subir al Everest. Él dio la respuesta más famosa de la historia de la montaña, ‘¿Por qué vas a subir el Everest? ¿Vas a arriesgar tu vida? ¿Vas a dejar a tu familia? La seguridad de tu casa y toda tu vida en Inglaterra, cómoda, tranquila’ Y Mallory dijo: ‘Porque está ahí’. Una respuesta que después motivó a muchos más a seguir subiendo cerros”, cuenta Álvaro Vivanco.