En "El Ingrediente", Matías Arteaga enseña el paso a paso de un rico marrón glacé, una delicada pero imperdible receta.

Ingredientes:
2 kg Castañas
1 lt Agua
1 kg Azúcar
Cáscara de limón
Vara de canela

Preparación:
Primero abrimos las castañas, con la ayuda de una puntilla y hacemos un corte por la mitad a lo ancho dejando 1 cm sin cortar. Aquí hay desafío, el corte tiene que ser cuidadoso, cortar al menos 2 mm para marcar la cáscara y la piel interior. Muchísimo cuidado con los dedos, es una pega delicada y minuciosa con puntilla.

Luego de que las tenemos peladas, seleccionamos las enteras y más bonitas para esta preparación. Las echamos a cocer a partir de agua fría, suavemente hasta que esté a punto de tomar hervor y apagamos, no se nos puede pasar la cocción, esto es muy ¡delicado!

Hacemos un almíbar de partes iguales de azúcar y agua con una ramita de canela, piel de limón y si tienen, vaina de vainilla. Agregamos las castañas al almíbar y cocinamos suavemente al fuego mínimo, hasta que tome un hervor, pero de burbujas casi inexistentes y apagamos. Dejamos enfriar y descansar en el almíbar al menos 2 horas o ideal toda la noche, y lo volvemos a repetir. Así le tenemos que dar al menos 8 “hervores” y descanso en el almíbar, se irán poniendo traslúcidas, se llenarán de este delicioso almíbar y tomarán textura. Al final las retiramos del almíbar y dejamos en una rejilla para que estilen. El almíbar lo reducimos hasta que esté a punto de caramelizar, y bañamos las castañas.

Para que queden aún más bacanes, horneamos 10 minutos a 120 grados para secar la película exterior del almíbar, queden crocantes y delicadas.

Esta preparación es de largo aliento, pero después de que están peladas, de muy poca pega! Delicada, sutil y de nos deja con la capa de superhéroe de la pastelería.