La historia detrás del Eau de Cologne: La fragancia que transformó la higiene
En “Un Viaje en el Tiempo”, Magdalena Merbilháa y Bárbara Bustamante visitaron un Museo de Farmacia ubicado en Alemania.
En este nuevo capítulo de “Un Viaje en el Tiempo”, nuestras queridas reporteras e historiadoras, Magdalena Merbilháa y Bárbara Bustamante llegaron a Colonia: una de las ciudades poco conocidas, pero más interesantes de Alemania.
En ese lugar, llegaron a Casa Farina. Un recinto que origina la fascinante historia del Eau de Cologne o más conocida como el agua de colonia. Esta fragancia marcó un antes y un después en la cultura europea.
El origen de lo que conocemos como "colonia" se remonta a la época del rococó. El perfumista Johann Maria Farina fue el creador del Eau de Cologne, nombrado así en honor a la ciudad de Colonia, Alemania, donde residía.
Este es el origen de la "Colonia"
El 13 de julio de 1709, Johann Maria Farina, un inmigrante italiano en Alemania, fundó la fábrica de perfumes más antigua del mundo: Johann Maria Farina gegenüber dem Jülichs-Platz (Johann Maria Farina, en frente de la Plaza de Jülich).
Farina creó su fragancia con notas de bergamota y limón, seguido por jazmín, lirio y jacinto, y un fondo de madera de sándalo, madera de cedro y almizcle. Su creación se volvió en un éxito y la ciudad de Colonia ganó fama en Europa durante los siglos XVIII y XIX y fue conocida como la "Ciudad de Fragancias."
Durante esa época, la higiene corporal era un desafío debido a la creencia generalizada de que el agua propagaba enfermedades. Por esa razón, los perfumes pesados, basados en almizcle, dominaban el mercado hasta que el Eau de Cologne ofreció una alternativa fresca.
En la actualidad, la fábrica original de Farina sigue en funcionamiento y alberga un museo que permite a las y los visitantes revivir los 300 años de historia de esta emblemática fragancia.