Científicos están trabajando para encontrar la causa de estas fallas en la Estación Internacional Espacial. Sospechan que componentes rusos no son buenos.

Sí, es la tercera fuga de líquido que la Estación Espacial Internacional (EEI) tiene en el año. Los ingenieros y astrónomos quedaron sorprendidos cuando vieron los copos de refrigerante congelado flotando por uno de los ventanales de la estructura. Todos del laboratorio con condiciones de microgravedad que presenta fallas en la refrigeración.

Según el reporte de la situación, esta fuga se originó en uno de los radiadores externos que proporcionan servicio al módulo científico Naúka, que es desarrollado por la agencia espacial rusa Roscosmos. La NASA aclaró eso sí que los miembros de la tripulación actual que se encuentran haciendo misiones en la EEI, no están en peligro. 

Fallas en la Estación Espacial Internacional

Sin embargo, como medida de precaución, los astronautas tuvieron que cerrar las contraventanas del segmento estadounidense para evitar alguna contaminación que los pueda afectar directamente. 

Por otra parte, Roscosmos detalló que el radiador afectado es uno de respaldo que fue entregado a la EEI en 2010 en el módulo de recepción Rassvet. Este, luego fue trasladado al módulo Naúka, durante una caminata espacial. 

Como este radiado es un componente adicional, la integridad del la estación no está comprometida según la agencia rusa. El radiador principal del espacio de investigación ruso funciona con normalidad y hasta el momento, no se han aplazado los experimentos científicos dentro del módulo Naúka. Por el momento, no se anunciaron planes para realizar una nueva caminata espacial en busca de la avería.

La NASA y Roscomos todavía no aclaran cuál es la causa de esta falla, pero han anunciado que están trabajando en un 100% a detectar el origen del incidente. Recordemos que por averías o situaciones como esta, tres astronautas quedaron atrapados en esta estructura durante más de un año. 

Pero este no es un hecho aislado, los problemas de refrigeración en la EEI, comenzaron en diciembre de 2022. Todo comenzó cuando la nave espacial atracada Soyuz MS-22 de un momento a otro comenzó a expulsar material congelado de su sistema de enfriamiento externo. 

Fue en ese momento cuando los astronautas Serguei Prokopyev, Dmitri Petelin y Frank Rubio, que deberían regresar a sus hogares, se percataron de la situación y tuvieron que cancelar el viaje de vuelta. En febrero de 2023, la nave de suministros Progress MS-21, también de origen ruso, experimentó el mismo problema relacionado con el refrigerante externo.

En Roscosmos, han concluido que en ambas situaciones las naves tuvieron problemas por perforaciones causadas por un micrometeorito. Queda esperar qué dicen las investigaciones que se están realizado ahora y en especial con el sistema de refrigeración de octubre.

Ahora bien, con este incidente reciente, la comunidad científica que está al tanto de esto, está sospechando de fallas en el hardware diseñado por la agencia espacial rusa, dado los últimos hechos. 

En la EEI, Estados Unidos y Rusia tienen módulos separados. Sin embargo, comparten una fuente común de energía y propulsión. Según los informes oficiales, los micrometeoritos tienden a impactar y dañar solo los componentes rusos. 

Por su parte, Rusia anunció que dejará de estar presente en la Estación Espacial Internacional antes del final del proyecto, y sus cosmonautas abandonarán el laboratorio en 2028. El plan que tienen contemplado es crear una nueva estación espacial propia, donde sus especialistas trabajarán en colaboración con naciones como Brasil y otras de Sudamérica.

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