La infección por estreptococo es una de las más invasivas y actualmente solo había alertado a las autoridades de Japón, sin embargo ha comenzado a expandirse.

El estreptococo es un conjunto de bacterias que hemos conocido durante mucho tiempo. Muchas de ellas residen de forma común en nuestro sistema digestivo, piel, vagina o boca. Dentro de este grupo, hay varias especies diferentes, y una de ellas es el Streptococcus pyogenes, el foco de este informe y responsable de los preocupantes casos de estreptococo detectados en Japón.

Según el doctor José Luis del Pozo, experto en Microbiología Clínica en la Clínica Universidad de Navarra de Pamplona, esta bacteria ha sido conocida por mucho tiempo y generalmente causa faringoamigdalitis aguda. 

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"Es la causa más común de faringoamigdalitis aguda en nuestra población, principalmente en niños en edad escolar, ya que se transmite principalmente a través de las gotas respiratorias, es decir, mediante el contacto cercano con una persona que tenga esta afección", explica. 

Se puede tratar con penicilina, ya sea de forma oral o intramuscular. Después del tratamiento, generalmente no suele causar complicaciones, según asegura este experto.

Las patologías causadas por los estreptococos

La segunda forma más común de enfermedad causada por el estreptococo, es el impétigo estreptocócico: "El estreptococo puede ocasionar patología a distintos niveles, y en segundo lugar, la patología más frecuente que puede ocasionar es a nivel de infecciones en la piel no complicadas, los impétigos, que se ven sobre todo en niños, y que se transmiten por contacto directo entre pacientes. Se forman costras amarillentas, similares a la miel seca, y es habitual verlo en varios casos dentro de una misma familia, o en niños pequeños. Habitualmente se trata con medidas tópicas y se soluciona, sin ninguna complicación más"

Por lo tanto, según enfatiza el especialista de la Clínica Universidad de Navarra (CUN), la mayoría de las infecciones causadas por esta bacteria son benignas y no graves, y se pueden tratar con antibióticos. 

De hecho, este experto en Enfermedades Infecciosas y Microbiología destaca que el Streptococcus pyogenes es una de las pocas bacterias que todavía son sensibles a la penicilina en la actualidad, lo que significa que pueden ser tratadas efectivamente con este antibiótico y no han desarrollado resistencia, "algo que no pasa con la mayor parte de las bacterias en la actualidad".

Las infecciones más graves

El doctor José Luis del Pozo describe cómo esta bacteria puede desencadenar infecciones graves, como la fascitis necrotizante, una afección que trasciende la piel y puede resultar mortal, generando gran preocupación en Japón.

Según el experto, la bacteria puede penetrar la piel hasta alcanzar la fascia, una capa que cubre el músculo, desencadenando una infección extremadamente agresiva y peligrosa que puede llevar a la muerte del paciente. 

Este tipo de infección es poco común, aunque existen cientos de cepas de estreptococo pyogenes, con diferentes características y propiedades. La mayoría de estas cepas provocan patologías benignas, mientras que solo algunos tipos específicos son capaces de ocasionar infecciones graves e incluso mortales.

Es crucial entender que la gravedad de la infección depende de las características particulares de la cepa de estreptococo pyogenes involucrada, lo que subraya la importancia de la vigilancia y el tratamiento adecuado para prevenir consecuencias devastadoras.

"Es cierto que las noticias han destacado los casos en Japón, pero a nivel nacional y europeo, desde aproximadamente diciembre de 2022, ha habido una alerta sobre un aumento en los casos de fascitis necrotizante e infección invasiva por 'estreptococo pyogenes' en comparación con años anteriores. Este fenómeno no se limita únicamente a Japón, sino que también se ha observado en otras regiones, tanto en Europa como en España, así como en otros lugares del mundo, donde se ha registrado un incremento en estas infecciones", destaca el experto de la CUN.

Este aumento ha llevado a los especialistas a estar más vigilantes, con un mayor grado de sospecha y una prontitud mayor en el diagnóstico. Sin embargo, el experto enfatiza que estas enfermedades son poco frecuentes en nuestra sociedad y no son habituales.