Revive la conversación con Fernando Pérez, Director del Museo Nacional de Bellas Artes: “No hay educación sin cultura, no hay cultura sin participación del arte”
El primer capítulo de “Testigo Futuro” fue protagonizado por el Premio Nacional de Arquitectura 2022 y Director del Museo Nacional de Bellas Artes, Fernando Pérez Oyarzún, quien prendió los fuegos con una interesante y reflexiva conversación junto a Susana Horno, conductora del espacio.
Para comenzar, Pérez ahondó en la percepción que tiene sobre el importante rol de los arquitectos en la sociedad y el impacto que generan en las personas. En ese sentido, señaló que “la arquitectura es una construcción cargada de sentido en el más alto grado que somos capaces”.
“Cuando disponemos materiales no solo producimos objetos, un soporte, un marco y una formalización de la propia vida humana, de manera que los arquitectos tenemos un mandato que tiene ribetes éticos porque no tratamos solo con materiales. En definitiva, estamos tratando con la vida de las personas y eso pesa mucho. Cuando trazamos una línea quizás afectamos una o muchas vidas y eso es muy serio”, explicó Fernando.
Por otro lado, el académico se refirió al desafío de proyectar el Centro de Extensión del Campus Oriente de la Universidad Católica que lideró junto a José Quintanilla, quienes tuvieron que hermanar el edificio de carácter patrimonial construido en 1926, con una obra arquitectónica con lenguaje contemporáneo.
Los nuevos lineamientos y metas del Museo Nacional de Bellas Artes, también fueron parte de los temas que se abordaron en “Testigo Futuro”, donde Fernando destacó que están realizando todos los esfuerzos por aprovechar al máximo posible el edificio y las colecciones que tienen guardadas.
“Por ahora y sin rendirnos, estamos con la obsesión de aprovechar cada centímetro cuadrado del museo, de multiplicar los espacios expositivos y de insistir en nuestros objetivos”, comentó, a lo que agregó que como institución tienen cerca de unas 6 mil piezas de colección, como la de Roberto Matta y donaciones interesantes de obras del siglo XVI y XVII, entre otras.
“La cultura tiene que estar desde el principio y en el corazón propio del desarrollo social y humano de un país como este y para eso falta mucho (...) No hay educación sin cultura, no hay cultura sin participación del arte”, enfatizó el Premio Nacional de Arquitectura.
Respecto al estallido social y las repercusiones que generó en las calles, y particularmente en algunas esculturas, Pérez asegura que hoy día el patrimonio se ha convertido en algo político y social.
“La gente pide que se cuide un barrio, pide que se declare una zona típica, para eso se manifiestan, escogen representantes, quieren participar de instancias legales. O sea, la relación entre patrimonio, sociedad, ciudadanía y comunidades, es estrechísima”, a lo que añade que el patrimonio ha generado reacción, ya que a su modo de ver las cosas, “es una condensación de representatividad, porque representa y condensa vida, historia, recuerdos, memorias, y un montón de cosas, y la gente reacciona a favor o en contra”.
Revive la conversación entre Susana Hornos y Fernando Pérez aquí.