En "Carlo Cocina", Carlo von Mühlenbrock enseña el paso a paso de unos deliciosos ravioles de ricota.

Ingredientes para 4 personas:
4 Yogurt naturales
250 gr de harina
2 huevos
1 yema de huevo
Sal
Sémola
200 grs de espinaca cocida y picada
Nuez moscada
1 cucharadita de maicena, disuelta ¼ taza de agua
150 grs de mantequilla
1 ramita de romero
Hojas de albahaca fresca
100 grs queso parmesano
Flores comestible

Preparación
En una olla colocar los yogurt, verter agua fría hasta 1 centímetro de la tapa. Llevar a ebullición y cocinar por 5 minutos. Retirar del fuego y dejar enfriar sin retirarlos de la olla con agua. Reservar
En un recipiente, colocar la harina, al centro verter los huevos y la yema de huevo, sazonar con un poco de sal y con la ayuda de los dedos integrar poco a poco los ingredientes, una vez mezclados, dar vuelta sobre el mesón limpio y amasar hasta obtener una masa homogénea, lisa y elástica. Envolver con plástico y dejar reposar por ½ hora
Espolvorear el mesón con sémola y colocar la masa para estirarla. Dividirla en dos partes y pasar por la máquina para pastas por el número más grueso, doblar en cuatro y repetir 2 veces. Volver a pasarla de la misma manera por cada uno de los números adelgazando la masa hasta llegar al número seis. Reservar las masas estiradas.
Para preparar el relleno, colocar los yogurt ya fríos, en un colador de tela o en un paño limpio, estilar presionando para eliminar la mayor cantidad de suero. Transferir a un recipiente. Y mezclar con loa espinaca. Sazonar con nuez moscada a gusto y sal, mezclar muy bien.
Estirar una masa sobre un molde para hacer ravioles presionando para marcar los ravioles. Rellenar cada uno con una cucharadita de la mezcla de espinacas y ricota. Pincelar todos los bordes con agua con maicena y colocar encima otra masa y con la ayuda de las manos ir eliminando el aire cubriendo todo el molde. Pasar el uslero para marcar y cortar los ravioles
Retirar del molde con mucho cuidado para que no se rompan.
Se pueden hacer sin el molde para ravioles, haciendo el mismo proceso directamente en el mesón y luego cortar con una ruleta para pastas.
En una olla con abundante agua hirviendo con sal, colocar los ravioles. Mientras tanto en un sartén derretir la mantequilla con la rama de romero y albahaca fresca. Una vez que los ravioles floten, verter un poco de la mantequilla en los platos, colocar los ravioles y rociar con el resto de mantequilla, añadir hojas de albahaca fresca y espolvorear con queso parmesano recién rallado. Decorar con una flor comestible y servir de inmediato.