¿Te has fijado que tu cuerpo resiente todo el peso del trabajo, traslados y responsabilidades? No es raro escuchar: “me duele el cuello”, “siento una molestia en la espalda”, “me cuesta dormir”, “tengo ansiedad", entre otros. Existen muchas formas para relajarnos y aliviar el dolor, pero seguro que esta te llamará la atención. 

Se trata de la terapia de flotación, en donde tu cuerpo se vuelve liviano y puede flotar por casi una hora gracias a unas cápsulas de flotación, pequeñas piscinas que cuentan con una concentración de sal de “Epsom” que permite tal fenómeno. 

 

 

Pude experimentar esta terapia y fue realmente una grata experiencia, ya que logré un estado de desconexión y relajación total gracias al ambiente del lugar, muy silencioso y con baja luminosidad. Además, la temperatura del agua es similar a la de tu cuerpo, lo que genera mayor placer dado que dejas de sentir la diferencia entre ti mismo y el agua que está a 35 grados celsius.

Esta sensación es realmente reconfortante, en mi caso, llegué a quedarme dormida. Cabe destacar que es muy seguro porque siempre estás flotando, además, proteges tus oídos con tapones y puedes pedir asistencia en todo momento. 

 

 

Los beneficios de esta terapia: 

Esta terapia fue diseñada por el neurofísico estadounidense John C. Lilly quién estudió por primera vez en 1954 el aislamiento sensorial en cámaras de flotación y desde ese momento se han estudiado sus beneficios tales como: la reducción del estrés y la ansiedad, la regulación del ciclo del sueño, el alivio de dolores. Por estas razones, muchos deportistas utilizan esta técnica, sumado al fomento de la creatividad, dado que te regalas un momento de introspección y meditación.

Algunas personas también lo han comparado con volver al vientre materno, espacio protegido y de ingravidez.  

Si quieres descubrir esta terapia, puedes hacerlo en floatchile.cl espacio que cuenta con varias cápsulas de flotación  y que tiene valores asequibles, considerando la experiencia.