Capaz de mimetizarse con su ambiente, el gecko cola de hoja tiene un talento único en el arte del camuflaje. ¡Encontrarlo es un verdadero milagro!

Maestro para pasar desapercibido, genio por excelencia de las artes del camuflaje, este gecko cola de hoja sorprende con su forma para mimetizarse con una rama de árbol. 

Perteneciente al género Uruplatus, este lagarto habita principalmente en la Isla de Madagascar, y en algunas partes de las islas Comoras. Los científicos quedaron maravillados cuando descubrieron este animal. 

Y es que su anatomía única y capacidad para pasar desapercibido es una característica única. Su cuerpo se aplana como si fuese una parte más de la corteza de un árbol. Sus escamas rugosas logran formar con una gran precisión detalles de hojas y ramas. La paleta de colores que cubre su cuerpo es igual a la vegetación que habita, donde destacan colores con tonos verdes y terrosos.

Pero esta capacidad no solo se la adjudica su apariencia. También su comportamiento. Es así como lo podemos ver haciendo movimientos lentos para confundir a otras especies de animales, y modificando su postura para parecer una real vegetación. Encontrarlo, es un gran milagro para quienes buscan sus maravillas.