Este verano ha sido uno de los más complicados para Chile en términos de incendios forestales. Según datos del SENAPRED, los siniestros han provocado la muerte de 24 personas, han destruido 1.478 viviendas y han dejado 5.945 damnificados.

Chile es un país que generalmente se ve afectado por incendios, pero ¿Por qué este año ha sido principalmente más duro que otros? Conversamos con Agustina Hidalgo, Jefa Forestal de Fundación Reforestemos, agrupación que se dedica a la conservación y reforestación de árboles en distintos lugares de Chile.

“Ninguna especie vegetal propicia el fuego. Se necesita material seco y una llama para que se encienda, pero las especies no se incendian solas. Por lo mismo, lo principal para estos incendios son las condiciones actuales como el verano, la sequía y las lluvias que tuvimos en primavera. Éstas aumentaron el combustible haciendo crecer las herbáceas cuyo ciclo reproductivo es anual, por lo que en verano están listas para tirar semillas y por lo mismo, ya perdieron toda su humedad y son combustible disponible. De esta manera, estos incendios se produjeron por el actuar humano y se propagaron debido a éste combustible disponible”, señaló Agustina.

Por otra parte y si bien, la medida tomada por MINAGRI Y CONAF de cerrar siete Parques Nacionales (Nonguén, Malleco, Tolhuaca, Contulmo y Nahuelbuta, Parque Lago Carlota y Río Clarillo), debido a las olas de calor y los incendios, afecta sustancialmente a las vacaciones programadas en época estival de gran parte de los chilenos, para Agustina es una medida necesaria para la protección, “hay un factor humano súper importante, ya sea por negligencia o por intencionalidad de la dinámica. Si sacamos a las personas de la ecuación probablemente también tendremos muy pocos incendios”, comunicó.

Recordemos que según CONAF los Parques Nacionales se definen como “Las regiones establecidas para la protección y conservación de las bellezas escénicas naturales y de la flora y la fauna de importancia nacional, de las que el público pueda disfrutar mejor al ser puestas bajo la vigilancia oficial”. Por lo mismo, es en estos lugares donde se logra un crecimiento y preservación más vigilada y protegida de los ecosistemas. “Lo más sensato en realidad es cerrarlos ya que no podemos arriesgar y exponer estos ecosistemas a peligros anexos”, agregó la Jefa Forestal de Reforestemos.

¿Qué podemos hacer?

Prevenir, educar y estar atentos a cómo nos comportamos en la naturaleza. Debemos comprender que si los incendios forestales en los contextos ya señalados se inician casi en el 100% de los casos por acción humana, también somos nosotros los responsables de que no ocurran y por lo mismo, es sustancial entender el poder de nuestros actos.

De esta manera puedes poner en práctica lo siguiente:
1. Encender fogatas sólo en lugares establecidos y preocuparse de que ésta esté apagada al momento de ir a dormir o retirarnos del lugar.

2. Intenta no fumar si te encuentras cerca de bosques o bien, llévate tu colilla.

3. LLévate toda tu basura, siempre.