Halloween: el oscuro origen de una fiesta universal
Conocemos esta festividad con distintos nombres, pero ¿de dónde viene realmente su origen?
Halloween, "noche de brujas" o la "noche de todos los santos", son las distintas formas de cómo conocemos esta festividad que se celebra alrededor de todo el mundo. Pero ¿cuál es realmente el origen de Halloween?
La palabra Halloween viene de la locución "All Hallow Eve" (víspera de Todos los Santos) y su procedencia tiene un vínculo muy estrecho con la tradición cristiana, pero también con creencias paganas celtas que conmemoraban el término de una cosecha con el "Samhain" y los romanos que homenajeaban a sus familiares fallecidos con el rito "Mundus patet", según relató National Geographic.
Origen de Halloween I: Samhain, la fiesta celta
En occidente, el equinoccio de otoño abre paso al cambio de hemisferio norte, es decir, se acaba el verano y llega el otoño oscureciendo el día más temprano, acercando un clima más hostil y proporciona los últimos frutos del año para luego hibernar sumirse en un sueño largo y cargado de silencio.
Esta fase, en el mundo celta se llama "Samhain", "una festividad de origen druídico celebrada entre el crepúsculo del 31 de octubre y el del 1 de noviembre y que señalaba el inicio del invierno y el año nuevo".
Durante Samhain, se creía que el mundo de los vivos y los muertos se mezclaba. Los celtas dejaban comida afuera para apaciguar a los espíritus y protegerse de energías negativas, lo que se relaciona con la tradición moderna del "truco o trato" en Halloween.
A lo largo del tiempo, Halloween ha evolucionado en una festividad que combina diversión y disfraces pero aún mantiene elementos de sus raíces celtas y creencias en lo sobrenatural.
Origen de Halloween II: Mundus patet o el día de los difuntos romano
"Mundus patet" se traduce como "mundo abierto" y se refiere al Mundus Cereris, una antigua construcción romana que conectaba el mundo de los vivos con el de los muertos. Esta entrada solo se abría tres veces al año: el 24 de agosto, el 5 de octubre y el 8 de noviembre, permitiendo el retorno de las almas difuntas a la tierra.
En la creencia romana sobre "el más allá", se encontraron espíritus malévolos que presentan notables similitudes con el imaginario de Halloween. Los textos antiguos mencionan a los "larvas", entidades que se nutrían de la vida de las personas, y los "maniae", seres que adoptaban la forma de espeluznantes esqueletos y provocaban la demencia en los vivos.
Origen de Halloween III: el día de Todos los Santos
El origen de la fiesta de Todos los Santos se origina en la creencia inicial de la Iglesia que los mártires merecían un día en el que se rememorara su sacrificio.
Esto condujo a que el papa Bonifacio IV estableciera en el siglo VII una fecha para honrar a todos los mártires del cristianismo el 13 de mayo. Cien años después, el papa Gregorio III amplió esta celebración a todos los Santos de la Iglesia católica y cambió su fecha a la actual, el 1 de noviembre.
Es claro que la selección de esta fecha parece estar vinculada al intento de reemplazar las festividades paganas de los difuntos, como el samhain celta o el mundus patet romano, en las regiones donde la Iglesia se había expandido y había adaptado sus rituales a las creencias previas.
De esta manera, cerca del 1 de noviembre surgieron otras festividades, como Halloween, la víspera, o el día de difuntos, que terminaron uniéndose en una celebración.
Halloween o la víspera de Todos los Santos
En la Inglaterra medieval, la palabra "hallow", actualmente utilizada para referirse a algo sagrado, era sinónimo de "saint" (santo). La festividad se denominaba "Todos los Santos". La víspera de este día evolucionó en una celebración independiente, llamada "All Hallows Eve", que en la Edad Media se fusionó con el día sagrado.
Desde Occidente a América
Halloween, despojado de su dimensión religiosa, recobró los aspectos más paganos relacionados con la veneración de espíritus de ultratumba y difuntos, así como la celebración del final de la cosecha y la preparación para el invierno. La festividad se trasladó al continente americano.
Pese a que Halloween fue ampliamente prohibido entre los primeros colonos estadounidenses, la nueva sociedad en Estados Unidos, compuesta por comunidades arraigadas en tradiciones agrarias, desarrollaron sus propias festividades, como el Día de Acción de Gracias, que tenían vínculos con la cosecha e incorporaron elementos de Halloween.
Con la inmigración masiva, especialmente de irlandeses en el siglo XIX, se introdujeron las costumbres de Halloween, y en el siglo XX, esta festividad se convirtió en una de las más importantes en Estados Unidos, especialmente para los niños.
Así, Halloween hoy es una fiesta con calabazas, alimento típico de otoño en ese lado del mundo, "truco o trato", gatos negros y brujas, seres terroríficos y del mal augurio que durante una noche pierden su papel de terror convirtiéndose en unas divertidas fiestas celebradas en todo el mundo.