El primer sábado de septiembre se celebra en Chile el Día Nacional del Circo, fecha en que los artistas rinden homenaje con sus distintas expresiones a esta aplaudida y querida disciplina, una de las más antiguas y tradicionales de Chile. Es por eso que 13C se embarcó en una entretenida aventura hasta el Gran Circo de Ruperto. 

Una bruja influencer le quitó la belleza y los seguidores de las redes sociales al príncipe Ruperto, desgracia que motivará al protagonista y su noble corcel a buscar por todo el reino lo que a él le pertenece. 

Ese es el tópico principal de la historia “Érase una vez un príncipe azul”, que trae nuevamente el Gran Circo de Ruperto al Mall Paseo Quilín, para entretener y sorprender a la familia completa. 

Un espectáculo que de principio a fin, convoca desde los más pequeños a los más adultos, con bromas que rescatan contingencia, humor blanco, y sobre todo, códigos clásicos y modernos que son transversales y aptos para todo el público. 

Un noble corcel que usa waze, un príncipe que baila la canción viral de Shakira “Te Felicito”, un combate de tik toks con temas como “Envolver” de la brasileña Anitta y una caperucita roja que envuelta en las redes sociales puede perder a su abuelita, es parte de las sorpresas que sacan carcajadas y que convierten este show en un imperdible para septiembre. 

Estas entretenidas intervenciones son entremezcladas con la destreza y arte de los mismos protagonistas de este relato, quienes le hacen un guiño a sus oficios, mostrando acrobacias, ilusionismo, contorsionismo, bailes y bellas interpretaciones con instrumentos poco convencionales. 

Y por supuesto, el humor está de la mano del conocido y querido personaje “el príncipe Ruperto”, que con su humor hábil, juguetón y blanco, logra encandilar a los niños y niñas, quienes aplauden y se emocionan con sus andanzas y explosivas locuras. 

Para Cristián Henríquez, intérprete del protagonista y dueño de “El Gran Circo de Ruperto”, era de suma importancia generar una propuesta nueva, innovadora y entretenida que además de convocar a toda la familia, tuviese un mensaje potente. 

“Nos esforzamos cada año por hacer cosas diferentes y este año no fue la excepción. Nos juntamos con Esteban Arancibia, productor y director del espectáculo, y dijimos ya qué podemos hacer y llegamos al nombre “Érase una vez un príncipe azul”. Ese título quedaba como un libro abierto que nos daba muchísimas posibilidades”, contó Henríquez. 

A lo que agregó que comenzaron a rescatar personajes que tenían en mente y lograron montar el espectáculo: ”Ahora, fue super difícil el montaje. Tuvimos acá un mes de ensayo, porque en la gira anterior era complejo ensayar, y ahí montamos todo lo que era este show que nos costó sudor y lágrimas, pero todo esto tiene un premio al final del camino y así fue. Creemos que estamos entregando un mensaje y qué mejor que somos parte de la cultura de este país”. 

“Somos hermosos y no necesitamos likes para sentirnos bien”, es una de las potentes reflexiones que hace Ruperto con su característica genialidad, para luego invitar a padres e hijos a salir un poco del mundo cibernético, y así volver a encontrarnos con nuestros seres amados, mirarnos a los ojos, abrazarnos y disfrutar de nuestra compañía, porque nadie en esta vida es eterno. 

Participa aquí y gánate 4 entradas para ver la entretenida función “Érase una vez un príncipe azul”  en El Gran Circo de Ruperto. 

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