33%: una cifra considerable de disminución de la deforestación en la Amazonía brasileña. Esto significa un cambio de políticas que han beneficiado completamente la naturaleza.

Un respiro para el planeta la verdad. Parece que las promesas del Presidente de Brasil, Luis Inácio Lula da Silva, están haciendo efecto. Todo tras la revelación de una caída de la deforestación en la Amazonía de ese país, que tuvo una disminución del 33%. 

Según imágenes satelitales del sistema de vigilancia DETER, del Instituto Nacional de Investigaciones Especiales (INPE) del país, se detectaron 2.649 kilómetros cuadrados de selva talados el primer semestre de este año. 

La cifra es reveladora, dado que en el 2022, cuando se hizo la medición durante este periodo, se revelaron 3.988 kilómetros cuadrados. "Alcanzamos una tendencia de caída consistente en la deforestación de la Amazonía", manifestó la ministra de Medio Ambiente de Brasil, Marina Silva, en una rueda de prensa. 

Más números bonitos: según las cifras, en junio la destrucción retrocedió un 41% respecto al mismo mes de 2022, cuando se talaron 1.120 kilómetros de vegetación. 

Por otra parte, en el Cerrado Brasileño, que es considerado uno de los biomas más agredidos, hay un reporte que la deforestación aumentó un 21% en el primer semestre del año, comparado con el mismo periodo del 2022. La cifra de kilómetros cuadrados destruidos es de 4.408 km2. Eso significa que hay que realizar "una acción tan urgente como en la Amazonía", según Joao Paulo Capobianco, secretario ejecutivo de Medio Ambiente.