El gran dolor de Luis Mateucci: su mamá falleció de cáncer
Luis Mateucci expresó sus sentimientos respecto a la muerte de su madre quien falleció en 2015 tras una dura lucha contra el cáncer, mediante un largo y conmovedor testamento el día de su cumpleaños. Además, la inmortalizó en su piel dedicándole dos tatuajes.
Los galanes también lloran… Y sufren. El dolor cuando pierdes a un ser querido te cala hasta lo más profundo, sobre todo cuando quien se va es la persona que trajo al mundo, es decir, una madre, pues ella es quien te cuida y te protege, quien te enseña y te valora más que nadie en el mundo. La muerte de una madre siempre te deja un vacío difícil de superar y muy bien lo sabe Luis Mateucci.
El cáncer de cuello uterino es el cuarto cáncer más frecuente en las mujeres, según la Organización Mundial de la Salud y la madre de Luis Mateucci fue una de las afectadas por esta enfermedad, falleciendo en 2015.
Luis Mateucci se expresa por la muerte de su madre
El dolor de un hijo que se queda sin su madre puede ser inexplicable, pero Luis expresó bellas palabras a su progenitora el día de su cumpleaños a través de una publicación de Instagram: “Hoy es uno de esos días tristes, que no te quieres levantar de la cama, no quieres escuchar a nadie, todo lo que te dicen te entra por una oreja y te sale por otra. Porque hoy era una fecha muy especial, hoy era ese día en que esté donde esté sabía que tenía que viajar y estar a su lado y jamás te falle. Hoy es el cumple de la mujer que me trajo al mundo, que no solo me tuvo en su panza sino que, además de ser mi mamá, fue mi mejor amiga, la que siempre estaba, la que nunca hubiera dejado que me pase nada malo, eras todo, mis ojos, mis dos pies y mis dos manos”, comienza Luis Mateucci.
Además, en la misma publicación, el galán cordobés comparte fotos de los tatuajes que se realizó en honor a su madre, uno dice “Mom” y el otro “La luz de mis ojos”.
Para finalizar la publicación, le promete a su madre que, tal como ella le dijo, sería feliz. “Cómo te extraño ma, ¡feliz cumple estés donde estés!”, termina diciendo Luis Mateucci.
