Max Cabezón al confesionario: conoce su círculo de apoyo, detalles sobre su relación con Shirley y más
Nuestro querido chef Max Cabezón se sentó a conversar en exclusiva en el Confesionario de Tierra Brava: cosechas lo que siembras.
Max Cabezón, chef y dueño del Pizza bar Flama, confesó quiénes eran sus compañeros más cercanos y el más lejano… También habló sobre su relación con Shirley Arica y dejó una tremenda confesión.
Los amigos de Max en Tierra Brava
El ex participante de MasterChef mencionó a sus personas más cercanas como su “círculo de apoyo”. Entre ellos están Fabio Agostini, Pamela Díaz, El Futuro, Shirley Arica, Arturo Longton, Jhonatan y Botota.
Si bien, con Fabio Agostini partió con “el pie izquierdo y una patada derecha”, el chef tiene claro que se llevan muy bien, tienen gustos afines, son del mismo signo e incluso nacieron en la misma semana. “Hay una especia de amistad y complicidad y me siento a gusto. Incluso cuando estamos peleando porque siento que podemos resolverlo de manera rápida”, expresó Max.
Con Pamela Díaz, Botota y Longton, dijo que se llevaban muy bien y reían demasiado. A Uriel lo quiere mucho. Y con Shirley Arica se lleva muy bien, incluso, le gusta.
En cuanto a Junior Playboy, dice que debe mantener una línea imaginaria y andar con mucho cuidado, pues a ratos conversan pero de la nada comienza alguna pelea. “Es como del amor al odio en un segundo” y eso le asusta un poco al chef.
Max Cabezón y Shirley Arica: “Los tiempos de calidad escasean”
Según Max, siente que a pesar de las pocas instancias que ha tenido junto a la modelo peruana, han sido de calidad. “No hay siempre un momento adecuado para poder llegar a conocerse”, confiesa Max, ya que, entre las actividades y la vida social en la casa, es difícil tener tiempo de calidad junto a ella. Recordemos que Shirley es del equipo rojo y Max del equipo verde. Sin embargo, quiere que se sigan conociendo y aprovechar al máximo las oportunidades.
La confesión de Max Cabezón
“Ha sido un poco más difícil de lo que creí, pasar los días. Creo que un día acá es como una semana o incluso más”, dijo Max. También confiesa que le ha dado mucho gusto cocinar y acercarse a sus compañeros a través de la gastronomía y que cree estar demostrando tener buen equilibrio, puntería, resistencia, ganas y coraje, convirtiéndose en un gran aporte para su equipo en las competencias.
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