Soledad Onetto y María Luisa Godoy visitaron Socios de la parrilla

Soledad Onetto y María Luisa Godoy revelaron duros momentos vividos en el certamen, aconsejaron a Pancho Saavedra y recordaron a Felipe Camiroaga.

Este sábado se vivió el último episodio de la tercera temporada de “Socios de la parrilla”, programa que mantuvo y consolidó la entretención en el prime de Canal 13.

Sus anfitriones, Pancho Saavedra, Jorge Zabaleta y Pedro Ruminot, acompañados del chef Rodrigo Barañao, recibieron en su quincho a dos exitosas periodistas, Soledad Onetto y María Luisa Godoy. Ambas tienen en común ser animadoras del festival latino más grande del mundo, el de Viña del Mar.

En relación a este tema, todos los asistentes conversaron con Saavedra y Godoy sobre la animación del próximo certamen viñamarino. En tanto, Pancho comentó que “no creo que lleve a la familia, porque me pondré más nervioso y creo que tengo que dedicarme 24/7 a estar con la Mari. Es mi primer año y tienen que entender eso. Quizás después, si es que hay otra oportunidad, ahí uno puede llevar a la familia”. Sin embargo, luego aclaró, “tengo la sensación que cuando ya esté más relajado, irán alguna noche”.

Frente a esta opinión del animador, Soledad le manifestó, “no puedo estar más en desacuerdo contigo. Conociéndote como te conozco, te puedo decir que la familia es trascendental. Es verdad que uno va a concentrarse, pero la familia te acompaña mucho, son icónicos en esos momentos trascendentales de la vida”, y agregó, “entiendo la concentración, pero tienen que estar, verte y tú verlos a ellos. Localizarlos desde algún punto del escenario, porque es lo que te llena de amor y de tranquilidad”. 

Por su parte, la actual animadora del Festival, María Luisa Godoy, reveló que “a mí me pasa completamente al revés de Pancho. Voy con los cinco hijos, la última vez fui dando papa, una vez fui embarazada. Entonces, yo necesito ir con todos, necesito verlos desde el escenario, necesito saber que están bien y para mí tiene mucho sentido que ellos lo pasen muy bien, eso me llena de energía”.

 

Cómo viven el Festival de Viña los animadores

La conductora de “Teletrece central” le preguntó a Saavedra si estaba nervioso, y él respondió “estoy ansioso y no quiero que la ansiedad me haga equivocarme. Tengo pesadillas con los furcios”, a lo que Soledad le aconsejó “mira, como dice el dicho, relájate y gózalo, esa es la única clave”.

Continuando con el festival de la Ciudad Jardín, Pancho les preguntó a ambas invitadas cómo enfrentaron los instantes difíciles sobre el escenario. María Luisa comentó lo siguiente: “para mí el humorista es el momento más tenso del festival, porque, en general, son personas a las que uno les tiene mucho cariño y, cuando son chilenos, uno lo único que quiere es que les vaya bien”.

“Yo había apostado que Jani Dueñas la iba a romper y le tenía todas las fichas, estaba feliz por ella, orgullosa, era chilena y me encantaba… Que a Jani Dueñas no le fuera bien, a mí me dolió mucho. Es gente con la que uno tiene un vínculo importante. Yo estaba orgullosa de presentarla en ese escenario”, aclaró la animadora.

Soledad Onetto y su paso por el Festival de Viña

Más adelante, Soledad Onetto desclasificó que llegó a animar Viña del Mar porque uno de los organizadores del certamen recordó que había animado un festival de la Vicaría de la Solidaridad. “Me pidieron conducir una fiesta de la juventud que se hacía en Plaza Italia y que la transmitía Canal 13 y era un evento donde se juntaba mucha gente”. Entonces, en una reunión donde la proponen como animadora del certamen, muchos pensaron que no tenía experiencia, y esta persona recordó este evento solidario, lo que le significó conducir el Festival en dos oportunidades (2009 y 2010).

En cuanto a su participación en este espectáculo, Soledad reveló que “fue una experiencia bonita, era imposible perdérmelo y si te lo ofrecen hay que hacerlo. Sin ser un objetivo para mí, fue una casualidad y probablemente el trabajo más lindo que me han encargado”. Y añadió “y después de la muerte de Felipe, tiene una explicación mayor para mí, un nuevo valor porque fue conocerlo. Yo a él lo conocía muy poco… esto nos permitió conocernos y fue un gran apoyo”.

“Me emociona mucho verlo porque creo que fue un animador impresionante para la televisión, un hombre tan joven y que fue muy doloroso cuando se murió”. Al ver las imágenes de ambos sobre el escenario viñamarino, Onetto recordó entre sollozos, “él estaba muy nervioso, una mezcla de ansiedad, tenía mucha carga... le pedían que fuera espectacular. Él cargaba con esa presión y me acuerdo que le di la mano y le dije ‘tranquilo, la gente te está esperando, la gente te ama y te van a aplaudir hasta el final’, y yo creo que eso permitió que todo fluyera y que él entrara con mucha confianza. Creo que fue un momento íntimo y muy lindo entre nosotros. Además, era la culminación de una carrera potente y larga”.

Jorge Zabaleta, quien en ese momento trabajaba en el área dramática de TVN, rememoró “quién iba a pensar que partiría tan joven, en el peak de su carrera a los 44 años, fue muy fuerte. A mí me tocó vivirlo desde dentro en TVN y fue muy traumático, de mucha pena. No sólo él, sino que todo el equipo (del 'Buenos días a todos'), que eran encantadores y maravillosos”.

El lado B del Festival

Ambas animadoras han vivido momentos muy duros dentro del Festival, Soledad vivió el terremoto del año 2010 y María Luisa el Festival post estallido social. Onetto contó que gracias a que los invitados estelares de la noche pidieron salir antes al escenario, la competencia de canciones quedó para el final, lo que significó que hubiera poca gente en el momento de la tragedia. Ella aún estaba en el recinto celebrando con su familia: “Estábamos todos muy nerviosos con lo sucedido… Luego volvimos al hotel y me encontré con Raphael, quien estaba desencajado”.

En tanto, Godoy, quien estaba embarazada de su cuarto hijo para la edición del año 2020, desclasificó “fue muy tenso, porque fue un festival que día a día sufría cambios o te decían ‘no sabemos si se hace’. Además, tuvo muchos detractores, entonces estaban los bandos que decían ‘Chile tiene que continuar y no se puede paralizar’, y otros que decían ‘no se puede tener la frivolidad de hacer este espectáculo’. Pero la música, el humor y el rubro artístico estaba paradísimo y Chile también necesitaba una fiesta”. Luego agregó, “había una cosa muy profunda detrás de lo que significaba realizar ese Festival de Viña, pero también sabíamos que íbamos a cualquier cosa”.

El icónico beso en la Quinta Vergara

Ya sentados en el living de la casa de los “Socios”, la conversación surgió en torno al beso de los animadores sobre el escenario de la Quinta Vergara. Soledad no se dio un beso en la boca con Camiroaga porque “yo siempre encontré que estaba pasado de moda”.

“Yo creo que el beso es una cosa de cariño, es un acto cariñoso y tenemos que mostrar la sorpresa en el Festival”, manifestó Saavedra. Fue así como recordaron los distintos besos de Mari con Martín Cárcamo, e incluso, el beso de estos animadores con Ricky Martin.

Finalmente, Pancho Saavedra tuvo la sorpresa de recibir cariñosos saludos y buenos consejos de históricos animadores del certamen: Paulina Nin de Cardona, Myriam Hernández, Rafael Araneda y Martín Cárcamo

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