Caída y cuidado del pelo: Cómo identificar las señales

El cuidado del cabello se hace cada vez más importante debido a la gran y especializada oferta que existe. Y aunque cada uno tiene su rutina, puede que no siempre estemos haciendo lo correcto. El dermatólogo especialista Néstor Carreño repasa los principales mitos sobre este tema y entrega consejos para cuidar tu pelo.

Existen muchos mitos y concepciones sobre el cuidado del cabello. Lavarse día por medio, ocupar agua fría, echarle anticonceptivos al champú, cortarse las puntas para que crezca y otros tips. Un tema que también divide a las personas al momento de repasar sus rutinas es cómo evitar la caída del pelo, atribuyéndole las causas al estrés, la alimentación e incluso a las condiciones climáticas.

Para responder esta pregunta es importante considerar que hay diversas razones. Néstor Carreño, médico cirujano, dermatólogo y especialista en tricología (área de estudio de patologías que afectan el cabello), explica que es importante diagnosticar a tiempo la pérdida de pelo porque puede estar asociado a enfermedades no necesariamente relacionadas con el folículo capilar.

¿Puede el champú provocar caída del pelo?

El dermatólogo y también director de la Sociedad Chilena de Dermatología y Venereología (Sochiderm) aclara desde un principio la duda que ha surgido en el último tiempo: “Es muy difícil que nos encontremos con algún producto que sea capaz de producir una caída”.

Dentro de los factores que afectan a nuestro cuero cabelludo, Néstor explica que, dentro de las posibles variaciones, las causas más frecuentes de la caída de pelo son el estrés, cambios en la alimentación o déficit en la ingesta de nutrientes y como efecto secundario cuando se toman por primera vez algunos medicamentos anticoagulantes, para la presión arterial, la epilepsia y anticonceptivos; causas que se distinguen como alopecias adquiridas, o sea aquellas con las que uno no nace.

“Lo importante es diagnosticar que no exista alguna condición de gravedad para el paciente o que le pueda significar un problema de salud mayor más allá de una caída de pelo que sabemos que después, si hacemos un tratamiento, el paciente lo va a recuperar”, agrega Néstor.

Mitos sobre el cuidado del cabello

Sobre algunos de los mitos más conocidos sobre el cuidado capilar, el dermatólogo Néstor Carreño explica los más frecuentes.

• Periodicidad del lavado: Sobre cuántas veces lavarse o cada cuánto hacerlo, Néstor dice que no hay respuesta categórica, ya que dependerá qué tan a menudo uno se ensucia el cuero cabellado. Por ejemplo, si una persona realiza mucho deporte, deberá lavarlo más seguido. Además, complementar con aceites y acondicionadores.
• Agua fría o caliente: ¿Cuál es mejor? En este caso el dermatólogo explica que el agua muy caliente puede dañar nuestro cuero cabelludo al “estimular la liberación del contenido de la glándula sebácea, por lo tanto el cabello puede quedar un poco más graso. Podemos también gatillar ciertas condiciones que afectan al cuero cabelludo como una dermatitis seborreica”.
• Secado del pelo: “El ideal es secarlo con una toalla de microfibra, que está como aplastando el pelo, y si no con una toalla corriente y después secar con aire de preferencia tibio o frío. La última recomendación, sería secarlo con aire muy caliente porque también la fibra capilar se va a secar”, explica Néstor.
• ¿Cortar con frecuencia?: Néstor aclara que el pelo no funciona como todos creen, por lo que cortarlo seguido no necesariamente asegura su rápido crecimiento: “El pelo o el folículo piloso, no es una planta que nosotros la podamos y va a tomar más fuerza. Lo que está vivo es el folículo, que es esta estructura que está dentro de la piel y es la que tenemos que cuidar para que tenga un correcto crecimiento”.
• Evitar toxinas: El dermatólogo recomienda también dejar las sustancias como el cigarro y el alcohol, ya que afecta directamente a las células de la piel, lo que identifica como “estrés oxidativo”, provocando un envejecimiento prematuro.
• Suplementarse correctamente: Néstor enfatiza en siempre tener una correcta nutrición e ingesta de vitaminas en la alimentación diaria, tales como Biotina, Cisteína, L-Arginina, Zinc y Ácido Fólico.

Entonces, ¿qué champú o producto utilizar?

Como hemos visto, el champú y sus complementos dependerán de la persona: “Por ejemplo, no es el mismo tipo de champú que necesitará quien tiene el cuero cabelludo graso, con un exceso de seborrea, con un exceso de caspa, que el que vamos a necesitar en un paciente que tiene el cuero cabello seco. De acuerdo a cada uno de estos tipos uno debería escoger champús que vamos a poder tolerar de mejor o de peor forma”, añade.

El mensaje final que el especialista destaca es que las enfermedades y patologías del cabello requieren siempre el diagnóstico de un profesional para descartar enfermedades de base o ajenas al cuero cabelludo y a la piel.

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