Antonella Ríos llega a los reality shows como nueva reclutada de "Palabra de Honor”: "Estoy cansada de los prejuicios, quiero que me conozcan como soy…"
La actriz Antonella Ríos se suma a los otros 10 participantes ya confirmados para el nuevo reality de Canal 13, "Palabra de Honor".
La recluta número 11 de "Palabra de Honor" acaba de ser confirmada. Se trata de la actriz, animadora y figura de redes sociales Antonella Ríos, quien será parte del nuevo reality show del 13.
La ex integrante de exitosas telenovelas como “Machos”, “Brujas” y “Lola” revela que en el pasado ya la habían llamado para integrar espacios de telerrealidad, pero que sentía que “no era mi momento, en cambio ahora sí siento que estoy en un mejor pie para poder entrar. Estuve depre y media triste y hoy me siento más capacitada para enfrentar un desafío así”.
Ríos confiesa ser “fanática” como televidente de los reality shows y que llega a ellos para aportar “humor, copuchear y mostrarme tal cual soy”. Sobre "Palabra de Honor", pone énfasis en que “me gusta el formato. Si bien es desconocido, uno ya conoce los anteriores y, además, está el tema militar y del entrenamiento, que me llaman la atención. Eso es como un leitmotiv y eso, sin duda, hará que me sienta más conectada con la narrativa del reality”.
Con todas las ganas de probar un nuevo formato televisivo para ella y en torno al que destaca su gran éxito y llegada con el público, Antonella también confidencia que “es un tema estar harto tiempo alejada de la familia, es un salto al vacío, por lo que es un desafío heavy. En ese sentido, pienso que es como grabar una película fuera de Chile”.
Pero más allá de lo anterior, la actriz cuenta que una de sus principales motivaciones para decidir estar en un reality show tiene relación con los prejuicios que hay en torno a ella. “Estoy cansada de los prejuicios, quiero que me conozcan como soy… la gente cree que ando todo el día en baby doll y ando más en pijama de polar”, detalla al respecto.
La ex protagonista de la película "Los debutantes" agrega que “hay mucho prejuicio sobre mí, como que soy pesada y está todo el tema sexy y que hago contenidos para adultos, pero ya me tiene un poco jodida que eso me determine. Lo que quiero es tratar de dar vuelta la página y mostrarme en la faceta que yo soy. No reniego de aquello, pero muchas puertas se me han cerrado por eso. Lo partí haciendo por necesidad, no ha sido fácil e, insisto, no niego que sí me gusta esto de la sensualidad, que es una de mis teclas, pero tengo muchas más teclas, como un piano, entonces puedo hablar de muchas cosas y mostrarme en este reality como para reivindicarme”.
En ese sentido, Antonella Ríos enfatiza en que "quiero reposicionar mi imagen y defender a quien realmente soy", recordando además que entró en el negocio de contenidos para adultos "porque la pandemia pasó la cuenta, no había pega y estuve a punto de perder el departamento, pero lo salvé gracias a eso. Era la necesidad de generar un sueldo".
De cara a "Palabra de Honor", la ex conductora del programa “Mujeres primero” cuenta que después del espacio de telerrealidad del 13 le gustaría volver a un proyecto de características como el ya mencionado, ya sea en televisión, radio o un podcast. Hoy, de hecho, da a conocer que “gozo siendo yo más que haciendo un personaje, así que me gustaría hacer un programa en donde uno hable de contenidos variados, misceláneo y con entrevistas. Implicaría refrescar la memoria de lo que hice varios años en La Red”.
En relación a si es rebelde, que es la tónica de los participantes de "Palabra de Honor", la figura de TV responde que “antes era más rebelde, pero sí tengo mi lado rebelde, que tiene que ver con decir las cosas que creo”, agregando que “las órdenes no me complican. Yo soy muy ordenada. Alguien el otro día me dijo ‘tú no crías a tus hijos (tiene dos hijos, de 17 y 8 años), tú los entrenas’, y sí, soy una pequeña soldado”.
Dentro de ese contexto, declara, asimismo, que “de alguna manera siento que estoy preparada para las competencias. En movimiento y destreza siento que me puede ir bien”, sintetizando que “todo eso lo puedo tolerar, pero no sé si a alguien roncando al lado mío. Ahí voy a tener que trabajar la paciencia”.