Capítulo 101 / Marco se escapó de la clínica de rehabilitación
Después del funeral, Gabriel e Inés regresan a su casa. Una vez ahí, la española le aconseja a su amigo a que aleje a su hija de Trinidad y Benjamín, porque podrían ser un peligro para ella. Pero también le plantea la posibilidad de que esa pareja hayan tenido que ver en la muerte de Josefa. No obstante, Gabriel se muestra reticente a esa idea y decide terminar con la conversación.
Raimundo y Ágata intentan solucionar los problemas que tienen como pareja, luego de la discusión ocurrida durante el funeral. Pero la relación parece no tener salvación. Ágata quiere irse de la casa porque no aguanta los celos tras enterarse de la amistad entre Raimundo e Inés. Por otro lado, Raimundo tampoco soporta la idea de que su mujer tenga tanta cercanía con Alonso. ¿Podrán resolver sus diferencias o no hay vuelta atrás?
Feliciano continúa obsesionado con la investigación y atando cabos de todas las pistas que existen, hasta que finalmente logra llegar a una conclusión: Marco es el Sr. Rojo. Su teoría se la comunica a Maite, pero ella reacciona incrédula.
Benjamín se acerca a Trinidad para llegar a una “tregua” luego de que ella lo encarara por sospechar de que él le oculta información. Su principal preocupación ahora es Feliciano y su obsesión por encontrar al real culpable. Es por eso que el próximo paso que ambos tienen en mente es saber qué tan cerca de la verdad está el comisario.
Marco se ha escapado del centro de rehabilitación. Pero la situación se escapa de control cuando Maite descubre a Marco en la clínica sosteniendo en sus brazos a la hija de Josefa. Ella le pide que le entregue a la niña, pero él se resiste. Está convencido de que, al ser legalmente el esposo de Josefa, a él le corresponde ser el tutor de su hija.