Maximiliano Cabezón

Tiene 25 años, proviene de Viña del Mar. Es ingeniero Civil Industrial y ha realizado estudios de robótica, pero su verdadera pasión es la cocina, la cual aprendió a los cinco años cuando en su casa no querían cocinarle huevos revueltos y tuvo que aprender observando a escondidas.
Creativo y sociable, hace surf y skate y le gustaría ser un genio como Tony Stark “Ironman”. Las empanadas mallorquinas de cordero Magallánico son su plato estrella y espera, en un futuro, instalar un hostal en Panamá y cocinarle a sus huéspedes.
Mayor inspiración al cocinar: Pensar en los comensales porque finalmente son ellos los que comen.
Especialidad: Improvisar en la cocina.
Su “última cena” antes de morir sería: Una pizza, “pero de 10 metros”, destaca.
Mejor consejo culinario que ha recibido: Practicar, cocinar todos los días, y ser ordenado en las preparaciones.
Famoso, vivo o muerto, al que le haría una cena: José Mujica. “Siento que ese compadre tendría una buena onda y es un gallo bacanísimo”, asegura.
Plato favorito: Todo tipo de pastas.
Tres ingredientes que no le pueden faltar: Sal, pimienta y ajo.
Si fuera un sabor sería: Agridulce.
La música que escucha mientras cocina: The Doors. “Es mi banda favorita. La escucho en todas las ocasiones”, revela.
Jurado favorito: Ennio Carota por “su carisma y porque está orientado a la cocina italiana, lo que a mí me gusta”.
Ex participante con que se identifica: Ignacio.
Debería ganar la competencia porque: “Me voy a esforzar con todo, voy a seguir mejorando, voy a aprender hasta superarme a mí. El esfuerzo que uno haga tiene recompensa al final del camino”.
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