Primer acercamiento espontáneo entre Fran y Guarén: “Te odio, me rompiste el corazón”
El ingreso de Guarén a Ganar o Servir la reencontró con su vieja amiga Fran Maira. Tras siete meses sin hablarse, la dupla enfrentó la idea de conversar sobre las diferencias que las distanciaron.
La disputa entre Guarén y Fran es un tema obligado en la casona de Ganar o Servir. Todos en el encierro saben que la distancia entre ambas estuvo antecedida por una gran amistad, y a nadie le sorprende la naturalidad de su cercanía.
Con Guarén en la casona era cuestión de tiempo para verlas enfrentar sus diferencias. Si bien algunas dinámicas ya las juntaron, lo de hoy fue el primer encuentro casual. Faloon envió a Fran a dormir con los sirvientes, posibilitando el cruce entre ambas.
El diálogo entre Fran y Guarén en Ganar o Servir
Valentina intentó acercarse a Fran con sonrisas y gestos de simpatía, pero esta sólo parece dispuesta escucharla tomando la iniciativa de lo que parece ser un diálogo pendiente. Por eso Fran, aseguró mirando a una cámara: “Yo estoy enojadísima con ella. Ella la ca…”.
Aunque aparentemente existe una razón de peso que estaría dificultando resolver sus asuntos pendientes frente a las cámaras, Fran no parece dispuesta a esperar a que termine el encierro para conversar.
“Yo sí quiero hablar contigo (…) con todo lo que yo he dicho: que lo he pasado mal, que he sufrido, que he vivido un duelo por ti que ni por un hombre había sentido. Que ahora estemos riéndonos, para mi es falso”, explicó Fran.
Guarén intentó defenderse explicando que la responsabilidad de la ruptura fue mutua, pero Fran la interrumpió para expresarle su decepción: “Te odio. Me rompiste el corazón”.
Ambas se fueron a conversar sobre sus diferencias junto a otros competidores. Fran habló con Luis, Daniela, Botota y Julia; mientras que Guarén se acompañó de Nico y Pangal. Cada una mostró toda su intención de arreglar las cosas.
La reconciliación entre ambas parece sólo ser cosa de tiempo. Porque el tono que comparten es claramente el de dos compañeras del alma, que aun después de la tormenta parecen quererse con la indestructible fuerza del amor.