Renuncia psicóloga que evaluaría a Nano Calderón
Pilar Navarrete, perito que realizaría la evaluación psicológica de Nano Calderón, decidió presentar su dimisión. Así lo dio a conocer en una carta enviada a Mario Vargas, abogado defensor del hijo de Raquel Argandoña. “No fui escuchada”, manifestó la especialista, quien destacó que fue “obligada a retirarme”.
Se trata de un nuevo episodio de un caso lleno de giros. La psicóloga que evaluaría a Nano Calderón en el penal Santiago 1 decidió renunciar a ese rol. Esto por la supuesta interrupción a su trabajo por parte de la defensa del joven, quien enfrenta un duro proceso judicial tras agredir a su padre con un cuchillo.
De acuerdo a informaciones proporcionadas por el diario “La cuarta”, Pilar Navarrete, la perito que estaba encargada de hacer la evaluación psicológica del joven, le envió una carta a Mario Vargas, abogado defensor del estudiante de derecho. El objetivo de la misiva es informar su renuncia y la razón de ésta.
“Habiendo iniciado la evaluación al requerido y teniendo disponible al imputado hace al menos media hora, fui obligada por los abogados defensores a abandonar el proceso”, indicó la psicóloga que iba a evaluar a Nano Calderón, quien se encuentra cumpliendo la medida de prisión preventiva.
En el texto, Navarrete expresó que “no fui escuchada, pero más grave aún, se interrumpió mi evaluación cuando a hacía media hora que tenía disponible al imputado”. De hecho, agregó que fue “obligada a retirarme, de lo cual el peritado (Nano Calderón) fue testigo”.
La experta manifestó que esta situación, junto a otros hechos similares ocurridos durante los últimos tres días, provocó que se sintiera “atropellada como profesional”. “Es así y por lo antes descrito, que presento mi renuncia al cargo y me veo en la obligación de desistir de la pericia”, finalizó Pilar.
Lo último en el caso de Nano Calderón
Esta renuncia de la perito sucede a pocas horas de que se diera a conocer una nueva declaración de Hernán Calderón Salinas en el contexto de la querella presentada en contra de su hijo, quien lo agredió el 11 de agosto pasado.
En la audiencia realizada este lunes, donde se rechazó la solicitud de la defensa de Nano Calderón para modificar la medida de prisión preventiva por arresto domiciliario, el querellante sorprendió con su declaración. “Fueron dos rasguños, no hubo una herida y mi mano derecha tiene una herida de absolutamente menor gravedad. Tengo todos mis dedos funcionando”, dijo sobre el ataque, recalcando que tiene la "absoluta convicción" de que su hijo "no vino a matarme".
Los dichos de Hernán padre ocurren a pocos días de que se difundiera la declaración de Kel Calderón, hermana del imputado, al Ministerio Público. “Comparezco ahora porque quiero manifestar mi preocupación y miedo por lo que pueda pasarle a mi padre y a mí”, afirmó la joven, quien destaca que su papá “está siendo objeto de presiones por parte de mi madre y de la defensa jurídica de mi hermano”.
