Jubilada se disfraza de abeja para vender miel en Maipú
Sally Godoy utiliza un traje de abeja para comercializar su producto día a día. La mujer, cuya historia se mostró en “Aquí somos todos”, contó que llegó a esto por necesidad, ya que su pensión se hace poca para sobrevivir. “Necesité reiventarme para poder tener el sustento”, confesó la vendedora.
Creatividad en su máxima expresión. Una mujer jubilada se disfraza de abeja para vender miel en Maipú. El caso de esta esforzada chilena fue exhibido este miércoles en el programa social que conduce Ángeles Araya por las pantallas de Canal 13, de lunes a viernes, inmediatamente después de “Caso Cerrado”.
En conversación con el notero Max Collao, Sally Godoy, nombre de esta mujer, contó las razones que la llevaron a vender miel en la villa Los Héroes. “Yo empecé con esto por necesidad porque soy una persona de 64 años, jubilada, necesité reiventarme para poder tener el sustento”, reveló, agregando que recibe 113 mil pesos al mes por todo lo trabajado en su vida,
“Entonces, me puse estre traje para poder salir adelante y no pedir ayuda a nadie”, explicó la mujer detrás del disfraz de abeja, quien también entregó detalles sobre la manera en que se le ocurrió realizar las ventas con un traje acorde al negocio.
Sally comentó que “veía a gente que tenía disfraz, salen algunos con disfraz y yo dije: ‘¿Por qué yo no si yo vendo miel?’, y nadie me compraba. Voy hacer algo que a la gente le llame la atención…Hasta que salí”.
“Lo más difícil es caminar todo el día, a veces llegai’ con los pies hinchados. No vender eso es lo difícil. Te bajoneai’…Llegai’ triste porque no tenís para comprarte…de repente, querís comprarte una cosita para comer y no te alcanza”, manifestó la abeja “Sally”, quien narró una triste anécdota. “Un día vendí dos mil pesos y llegué a la casa y me puse a llorar. Dije: 'Hoy día fue un día pésimo'”, relató.
La vida detrás del disfraz de abeja
Godoy también fue consultada sobre su vida personal. “Vivo con mi marido y mi hijo. Él también está con pensión, gana 145 mil pesos, tiene 70 años y está mal de la vista. Gracias a Dios, se operó y quedó bien”, afirmó la vendedora, quien indicó que el hijo con que vive “tiene esquizofrenia y nadie le da trabajo por ese motivo”.
Sin embargo, esta mujer vestida de abeja toma de la mejor forma posible su decisión de vender miel en las calles de Maipú. “Gracias a Dios, me distraigo y uno, como es de la tercera edad, tiene que reinventarse y salir de la casa, no estar ahí encerrada”, expresó sobre su llamativa manera para ganarse la vida.
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