Chile Lindo | Capítulo 4
“En Chile Lindo. El país que soñamos”, Sol y sus invitados conversan en un contexto completamente diferente al que están acostumbrados.
En el cuarto capítulo de “Chile Lindo. El país que soñamos”, la periodista, documentalista y viajera de corazón, Sol Leyton viajó con el gimnasta Tomás González a Punta Arenas.
Tomás González lleva 6 años de relación con Juanes y cuenta que: “Hubo un periodo en el que me aferré mucho, no estaba dispuesto a abrir mi corazón y entregarme tanto. Y ahora estoy súper bien con mi relación actual”.
El deportista comenta de su pareja: “Es alguien increíble, generoso, es lo máximo, tiene paciencia, se entrega, tenemos una muy buena comunicación. Creo que nos complementamos muy bien. Me di más tiempo también para ir construyendo esta relación. Probablemente mi principal error en mis relaciones fue ese que quizás me apresuraba y a veces no esperar mucho sino, que ir viendo cómo va avanzando la relación”.
Además agrega: “Nos amamos muchísimo y nos encantaría formar una familia, de aquí a un tiempo más yo creo que podría ser.”
El deportista también nos contó sobre el trabajar con su familia: “Es difícil, pero creo que si hay buena comunicación, se logra. Es que mis papá fueron súper respetuosos, nunca se metieron en temas técnicos. Ellos respetaron mucho su rol de padres, apoyo, contención, yo nunca me sentí presionado por tener que cumplirles a ellos”.
Tomás González explicó las razones de su libro y sobre los temas que toca: “Sentí que era el minuto de poder decir, bueno este soy yo. Finalmente me abro un poco a mi vida, a que la gente conozca realmente lo que vive uno como deportista, como persona en distintas áreas”.
“Yo creo que retirarme del alto rendimiento es una carga menos, a medida que uno va creciendo, madurando, por suerte tuve el apoyo de mi familia que para mí es lo más importante, pero igual mi deporte es súper machista, quizás yo no estaba dispuesto a dar explicaciones de mi orientación sexual”, comenta Tomás González.
Por último, habló sobre su adiós alto rendimiento: “Me pasa que decir como adiós al alto rendimiento es un poco quizás darle también un respiro a mi familia, pese a que igual seguimos con la escuela y todo ya no es como antes. Como que mi mamá no tenga que estar tan estresada con mis problemas porque al final siempre trato de un poco suplir esta falta de apoyo que hubo en su minuto”.
“Mi carrera deportiva significaba como muchos sacrificios no solo de mí, sino que también muchas energías y mucho tiempo de mi mamá de mi papá, de mis hermanos de repente porque al final en cierto minutos yo necesitaba mucho apoyo y me imagino que hubo un costo ahí también, emocional quizás. Lo veo como un retiro no solo mío sino que también de ellos”, explica Tomás González.
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