Sergio Lagos recordó divertida anécdota junto a su padre
Mientras el panel revisaba el tiempo en el sur de Chile, nuestro conductor, Sergio Lagos, comenzó a recordar momentos divertidos de sus vacaciones pasadas en esa zona.
"La playa Blanca, donde está geográficamente la mitad de Chile, es una playa increíble es una de las playas que tiene una condición muy especial, tiene además restaurantes, pero es una playa amplia, bastante amplia, queda entre Coronel y Lota", comenzó recordando Sergio Lagos respecto a sus vacaciones pasadas.
A esto agregó que "entre las cosas divertidas que tenía era una discoteque que funcionaba de lunes a domingo, a las 4 de la tarde la gente metida dentro de la discoteque, bailando con traje de baño, era una cosa increíble”.
Entre risas, nuestra conductora, Tonka Tomicic, le preguntó que si acaso este recinto era una especie de discoteque que funcionaba de día y frente a esto, Sergio contestó que sí.
"Era una locura, la gente bañándose, la gente en la playa con sus cosas, pero algunos decían 'papi, mami, me voy a ir un ratito a pasear' y se metían a la discoteque y era muy divertido", fue parte de la respuesta que entregó.
Sergio Lagos aseguró que toda la vida concurrió a estos lugares, ya que su papá trabajaba en el Hospital de Lota y su familia quería estar cerca de él. Al respecto, Tonka le preguntó a Sergio que a qué edad comenzó a asistir a este tipo de lugares y nuestro animador confesó que a temprana edad.
"Tempranito, pero no me dejaban estar mucho rato, porque era muy chico, 12 años, 10 años, yo iba a mirar todo lo que pasaba en ese lugar y era tremendamente increíble", respondió Sergio.
En el panel se produjo un divertido momento cuando Tonka y Sergio comenzaron a recordar la música que se escuchaba en esos tiempos, aproximadamente por 1984-1985, y en el estudio comenzó a sonar “Vuela, vuela” del grupo Magneto, provocando que todos se pusieran a bailar.
Recuerdos de Sergio Lagos en Concepción junto a su padre
En el estudio Sergio Lagos recordó otro momento de su pasado, esta vez siendo mucho más adulto, también en el sur de Chile, junto a su padre, quien lo llevaba a conocer lugares bohemios.
"Me acordé de otros lugares en Concepción, La Tropicana, que ya no existe (...) esto ya mayor, más adulto", comenzó relatando el animador, quien después agregó que en este lugar habían bailarinas exóticas.
"Mi padre, del cual hemos hablado muchas veces que era un vividor, no encontraba nada más divertido que llevarte a conocer cosas que bueno eran insólitas. A los 17 años me llevó, estábamos todos en la casa y de repente decía 'bueno, se acabó acá la diversión' y partíamos a recorrer la ciudad, familia entera, no era solo mi padre y yo", fue parte de la confesión del animador.
A lo anterior agregó que “recuerdo que le decían 'pero doctor, cómo trae al joven', pero si yo ya era un pailón' grande y él decía 'bueno, algún día lo teníamos que traer' y la gente del Tropicana en esa época hizo una licencia y pude participar de ese maravilloso mundo antiguo”.
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