Abogado es acusado de envenenar a mujer para cobrar seguro de vida
En Bienvenidos conocimos el caso de un abogado que está acusado de envenenar a su ex pareja para cobrar un seguro de vida.
El abogado Ricardo González Latorre, armó un maquiavélico plan para envenenar a su ex pareja causándole la muerte en base a la ingesta de alcohol metílico. Todo esto con el único fin de cobrar tres seguros de vida por 110 millones de pesos.
El hombre de 58 años está acusado de homicidio calificado en contra de Natalia Veliz López. Todo esto habría ocurrido el 28 de junio de 2018, un día antes de que fuera hospitalizada por intoxicación por metanol, donde se habían reunido para compartir juntos bebidas alcohólicas.
El vínculo del abogado y su ex pareja
El imputado habría conocido a Natalia a través de redes sociales el año 2017 y habrían establecido una supuesta relación de negocios en la que él gestionaría la venta de frutos secos y ganados, y le entregaría parte de las ganancias a la mujer.
Sin embargo, su plan futuro aparentemente era otro, ya que tiempo después convenció a Natalia para que sacara tres seguros de vida cuya beneficiaria sería la hija.
De acuerdo con lo informado por Eduardo Gómez, inspector BIPE, "el imputado desde un inicio ayudó en la tramitación administrativa de los documentos de la víctima. A la fecha se logró establecer que uno de los seguros, las firmas que están estampadas ahí son falsas".
Junto con esto Gómez indicó que "cabe hacer presente que ese seguro fue el que cobró el imputado por un monto de $110 millones".
Del otro lado, el Fiscal de Quilpué, Hernán Silva, explicó que “la víctima tenía tres seguros de vida en diferentes compañías y el beneficiario de dichos seguros de vida en las tres compañías era el imputado. Ese es el móvil por el cual él planificó y ejecutó este delito”.
El abogado efectuó la misma técnica
Esta no sería la primera vez que González Latorre hace algo parecido. En 1997, en Los Andes el sujeto fue condenado por el delito de homicidio calificado, en un caso donde la víctima tenía un seguro de vida del cual era beneficiario, pero que no pudo cobrar porque no se habían cancelado las últimas primas de esa póliza.
Otro caso similar ocurrió en Valparaíso el 2004. En aquella instancia el imputado fue investigado como el posible autor del crimen de una mujer que también tenía seguro de vida, pero no se logró acreditar su participación.
Finalmente, el año 2012 en Villa Alemana, se concretó un homicidio donde la víctima también tenía un seguro de vida y donde personas cercanas al imputado eran beneficiarias.
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