Denuncian a automotora que vendió autos y no pagó a sus clientes

¿Qué haría usted si una automotora se compromete a vender su vehículo y pagarle en 15 días hábiles pero ésta no cumpley desaparece sin dejar rastro? 

Esta es la situación que están viviendo más de 10 personas quienes fueron contactados por una empresa automotriz que, luego de presuntamente vender sus vehículos no les entregó respuesta alguna.

Un modus operandi que increíblemente habrían repetido en varias ocasiones. Todas las víctimas publicaron el anuncio de veta de su vehículo vía redes sociales y una empleada de la automotora los contactó.

Una de las víctimas, Víctor, nos contó que publicó la venta de su camioneta por Facebook y fue contactado por la automotora Auto Vir quienes le ofrecieron hacerse cargo de la venta y el papeleo.

Víctor Alcarraza fue despedido de su trabajo en febrero de 2020, días antes de que la pandemia llegara a nuestro país, con la intención de poner un emprendimiento puso su vehículo a la venta.

Luego de los contactos telefónicos, Víctor nunca sospechó ni encontró algo que le llamara la atención y que todo avanzaba como le habían explicado.

Debido  a la llegada de la pandemia no se concretó la venta, es por eso que en junio se contactaron con él desde la automotora, esta vez sí prosperaría la venta.

¿Cuándo Víctor se dio cuenta que podía ser estafado por la automotora?

Todo cambió el 17 de agosto cuando se iba concretar la venta y una persona iría a sacar su firma, le pidieron los datos de la cuenta para proceder con el depósito de la venta del vehículo.

El 11 de septiembre era la fecha de pago que tenía estipulada en el contrato de consignación, en él se indica que cuando el vehículo fuese vendido la automotora tendría 15 días hábiles para pagarle a Víctor, algo que nunca ocurrió.

Víctor trató de ser paciente y esperó su pago unos días más, la automotora  se excusó diciendo que habían tenido un problema con la chequera y que solucionando eso realizaría el pago.

Posterior a la sorpresa que se llevó cuando llegó a la oficina y no encontró a nadie, Víctor comenzó una encrucijada que lo llevó a visitar en varias ocasiones la empresa.

Desde entonces Víctor nunca más supo de su vehículo ni del dinero que supuestamente debía estar en su cuenta bancaria. Tras una pequeña investigación que realizó él mismo, se enteró que su vehículo había sido traspasado a una tercera persona pero él no habría recibido ni un peso. 

Lamentablemente como Víctor, existen otros casos.

 

 

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