Julia Wendell admite que podría no ser Madeleine McCann: Ahora cree ser otra niña desaparecida
La joven entregó nuevas declaraciones que la alejan del caso McCann, pero plantea nuevas dudas de su origen.
La joven de 21 que a mediados de febrero creo una cuenta planteando la posibilidad de ser Madeleine McCann, ha generado gran revuelo entre sus seguidores y los medios de comunicación que esperan una prueba de ADN para saber si es realmente la niña que detuvo el mundo en su busca.
Luego que la policía polaca descartara la posibilidad de que Julia Wendell fuera Madeleine McCann, por contar con pruebas de la familia Wendell que la reconocerían como hija legítima de la familia.
En un nuevo live la joven de 21 años afirmó que podría no ser Madeleine, pero planteó la posibilidad de ser otra niña secuestrada en la infancia pues la vidente Fia Johansson dice estar segura del origen trágico de Julia.
Recordemos que Julia comenzó su travesía por demostrar que era Madeleine cuando Fia le reveló provenir de un pasado muy turbio y oscuro. La vidente, quien también es su representante legal, se encontraba junto a ella en las nuevas declaraciones de la joven.
Livia Schepp desaparecida en Suiza
Según las declaraciones realizadas en el live la familia de Livia Schepp se contactó con Wendell pidiendo un examen de ADN solo para descartar que no era la niña desaparecida. Livia desapareció a los 6 años, cuando su padre se la llevó junto a su hermana y se quitó la vida.
Los Schepp, familia de origen suizo aun buscan a ambas hermanas, pues el padre de estas se llevó a las niñas de la casa de su exmujer y desapareció junto a ellas. Posteriormente al hombre lo encontraron muerto junto a una carta en la que indicaba que había matado a las niñas.
Pero los cuerpos de las pequeñas nunca fueron encontrados y por ello la familia Schepp buscó a Julia con la intención de realizar un examen de ADN para descartar que no fuera Livia. Wendell aceptó realizar el examen y pretende llevarlo a cabo en un lugar público para no dejar lugar a dudas de su veracidad.