María José Cristerna, conocida popularmente como "La Mujer Vampiro", tiene el récord de ser la mujer con más modificaciones corporales en el mundo. Para ella significa un compromiso y una emoción llevar en su piel algo que la simboliza.
Cuando María José Cristerna, de 46 años, va por la calle, capta todas las miradas. La mayoría de la gente la voltea a ver por curiosidad, pero también hay quienes la contemplan con anhelo – de algún día tener su piel de la misma forma – y con miedo. Esto debido a que ella, además de abogada, madre de familia y fanática del ejercicio, adora los tatuajes y las perforaciones. Es la mujer con más modificaciones corporales del mundo.
La mujer nacida en Guadalajara, México, no olvida la primera vez que marcó su dermis: siendo adolescente se hizo una perforación en la nariz. En ese momento no se imaginó que sería reconocida como "La Mujer Vampiro" por sus más de 49 intervenciones en su cuerpo.
Siente conexión cada una de sus intervenciones
"La primera perforación fue una que me hice en la nariz cuando tenía como 12 años. Luego un tatuaje a los 14, el logo de una banda de black metal. Era raro, era algo diferente para nuestra cultura y más en ese tiempo", comentó Cristerna, según reseñó Milenio.
"Después de los 18 años es cuando me empecé a hacerme más cosas; yo trabajaba dentro del ámbito del tatuaje y la perforación, pero ha sido paulatino, para mí ha llevado varios años", añadió Cisterna, conocida como La Mujer Vampiro.
Después de que entró a ese mundo no quiso salir más. Además, cada modificación y diseño que lleva sobre su piel tiene un significado especial, porque nada se lo ha hecho a la ligera.
"Para mí es algo muy importante porque normalmente son cosas que traigo internas y es mi forma de sacar lo interior al exterior. Es una emoción y un compromiso traer algo que para mí simboliza, por lo mismo me lo pienso mucho, no soy de las personas que se están tatuando todos los días", confesó.
"Si no estás muy seguro de lo que quieres, va a llegar un momento donde algo que era tan bonito ya no va a ir contigo. Hay que pensarlo. Hay que saber con quién vamos también porque he conocido casos de chicas que sufren asaltos", agregó.
Es común que las personas que llevan este estilo de vida sean discriminadas al momento de conseguir trabajo o ser tomados con seriedad, pero para Cristerna nada de esto importa porque su felicidad está primero.