"Solo necesitan amor": Madre salió a repartir abrazos y emocionó a los asistentes de la Marcha del Orgullo

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Una madre emocionó hasta las lágrimas a los asistentes de la XXII Marcha del Orgullo. La mujer llegó hasta la Plaza Baquedano con un simple cartel amarillo que decía "Abrazos de mamá gratis"

Durante la tarde de este sábado las calles del centro de Santiago se llenaron de colores gracias a los asistentes a la XXII Marcha del Orgullo, la cual tenía como consigna pedir el fin de la violencia por orientación sexual y la reforma del artículo 365 del Código Penal, que sanciona el sexo homosexual en menores de 18 años. 

"Abrazos de mamá gratis"

En medio de los coloridos outfits, pancartas y banderas de la diversidad LGBTIQ+, se encontraba una madre que llegó con su letrero que decía "Abrazos de mamá gratis". 

Se trata de Juana Bravo, una dueña de cada de La Florida de 63 años, quien quiso hacer una demostración de amor al ofrecerle abrazos a los asistentes sin discriminar a nadie. 

Ese simple ofrecimiento bastó para que se formara una larga fila de quienes querían recibir el cariño. Incluso, tras los abrazos, varios terminaron emocionados hasta las lágrimas.

Un gesto de apoyo

En conversación con Las Últimas Noticias (LUN), Juana se refirió a la "experiencia hermosa" que vivió al entregar un simple gesto de amor a quienes lo necesitan. 

"Estoy con mi hija, apoyándola, y a la vez quise ayudar a tantos chicos que no tienen el apoyo de su madre... Cuando mi hija me lo comentó quise venir, iba a ser una experiencia hermosa", explicó Juana.

La mujer relató que en media hora entregó abrazos a unas 30 personas, algunas de las cuales le dijeron cosas como: "Ojalá mi mamá algún día me dé un abrazo como el suyo".

"Muchos han llorado. En el fondo, solo necesita amor, nada más", sostuvo Juana.

"A muchos no los entienden"

A pocos metros de Juana estaba Carmen, madre de tres hijos que llegó hasta el centro de la capital desde la comuna de Pedro Aguirre Cerda, también a repartir abrazos.

"A muchos niños en sus casas no los entienden y a veces el abrazo de una mamá, aunque no la conozcan, es rico", comentó la mujer a LUN.

"Hay varios que lloran, yo también me emociono, pero no lloro. A los niños no hay que entenderlos, hay que quererlos, simplemente eso", dijo.