Japi Jane lidera coqueta celebración en el Día Internacional del Orgasmo Femenino
La salida del metro Tobalaba fue el epicentro elegido por la reconocida tienda de juguetes sexuales, para realizar durante la mañana de este martes una entretenida iniciativa enfocada en abordar la brecha de placer que existe entre hombres y mujeres.
Estudios recientes han revelado una significativa diferencia en la experiencia de placer entre hombres y mujeres en parejas heterosexuales. Mientras los hombres alcanzan el orgasmo en el 95% de los encuentros sexuales, las mujeres solo lo logran el 65% de las veces. Es crucial destacar que esta diferencia no se debe a cuestiones fisiológicas, sino que a factores culturales que han generado tabúes y limitaciones en torno al placer femenino.
Razón por la cual, Japi Jane decidió sumarse a la conmemoración del Día Internacional del Orgasmo Femenino en Latinoamérica y otros países del mundo, a través de una alegre y divertida intervención callejera, que tuvo como objetivo fomentar una conversación abierta y sin miedos sobre la sexualidad femenina, la importancia del placer sexual y la necesidad de acortar la brecha que existe entre los géneros.
Durante la actividad, Jane Morgan, dueña de Japi Jane, enfatizó sobre lo crucial de poder hablar desde la naturalidad estos temas, sin vergüenzas y agregó: “Nos llenamos de buenas vibras durante la actividad al ver la respuesta positiva de las personas cuando conversaron sobre sexualidad a plena luz del día y en la vía pública. Pero principalmente, nos emocionamos con las reacciones de las mujeres, quienes estuvieron muy dispuestas a comenzar a priorizar su placer, sin culpa”.
Y como una invitación para abrir los sentidos y explorar intensas sensaciones, para todos quienes se acercaron al staff de Japi Jane para conversar, recibieron de regalo entretenidos juguetes sexuales de la tienda, en una iniciativa que apuntó a promover la sexualidad y el orgasmo como una parte natural y saludable de la vida. “Me llena de alegría poder realizar educación sexual en formatos no tradicionales donde entre risas y un poco de vergüenza, las personas salen con nuevos conocimientos sobre sus cuerpos, la sexualidad y su propia capacidad del placer”, concluye Morgan.
