La mujer que asesinó a su amante y cocinó sus restos para alimentar a los hijos de la victima
Autora de uno de los crímenes más atroces ocurrido en Australia, que hizo flaquear hasta al más experimentado de los policías.
Katherine Knigth tenía 45 años cuando se convirtió en una de las asesinas más despiadadas de Australia. Ocurrió en febrero del 2000 cuando los policías se encontraron con el dantesco espectáculo.
La mujer que sufrió violencia desde la más tierna infancia y fue abusada hasta los 11 años por miembros de su familia, tenía tras de sí un largo historial de violencia hacia sus parejas, a todos intentó matarlos varias veces, hasta que lo concretó finalmente el 29 de febrero del 2000.
Katherine pasó por la escuela sin pena ni gloria, hacía bullying a sus compañeros de clases, nunca aprendió a leer y a pesar de ello avanzó de curso hasta los 15 años, cuando finalmente se retiró de la escuela.
Antiguas parejas e intentos de homicidio
Un año después de dejar el colegio encontró el ‘trabajo de sus sueños’ en un matadero, cortaba las vísceras de los animales y permaneció en ese trabajo hasta que fue a parar a la cárcel. En 1974 se casó por primera vez, desde su luna de miel intentó asesinar a su marido, a quien estrangulaba regularmente, lo soltaba justo antes que dejara de respirar.
Su primer esposo, que también era alcohólico igual que el padre de Katherine, soportó los intentos de homicidio durante 10 años, hasta que finalmente se separó de la mujer. El siguiente amor de Knight vio como la mujer degollaba a su perro frente a su cara y se separó cuando intentó matarlo con unas tijeras.
Brutal asesinato
Finalmente, conoció a Thomas Price con quien fue infiel al padre de su hijo, quien la abandonó luego de enterarse. La nueva relación fue como una transformación, todos a su alrededor notaban el cambio que hubo en ella cuando comenzó con Price.
La pareja permaneció junta hasta febrero del año 2000 cuando Katherine apuñaló en el pecho a Thomas y él puso una orden de alejamiento contra la mujer. Luego de lo ocurrido Price dijo a sus amigos que si le pasaba algo Knight era la culpable, temía por su vida.
El 29 de febrero Katherine entró en la casa de Thomas mientras él dormía, cuando despertó tuvieron relaciones, Knight esperó que estuviera profundamente dormido para asestarle 37 puñaladas en el pecho.
La mujer colgó el cadáver de su amante en un gancho para carne que llevó desde el trabajo, decapitó a Thomas y desolló algunas trozos que luego preparó en un plato de comida, la cabeza de Price estaba en una olla hirviendo con verduras cuando llegó la policía.
Katherine se había acostado junto al cadáver mutilado de su amante y tomó una gran cantidad de pastillas, pero sus intenciones de suicidarse quedaron frustradas cuando llegó la policía, advertidos por los colegas de Thomas cuando no llegó al trabajo ni contestaba las llamadas.
Katherine Knight fue la primera mujer en Australia en ser sentenciada a cadena perpetua, ella nunca admitió el crimen, pero el juez dejó estipulado que ella nunca tuviera acceso a la libertad condicional.