Junko Furuta: Uno de los peores crímenes en Japón se vuelve tendencia en Twitter
Gracias a un tweet que se sospecha podría provenir de uno de los implicados en el crimen, en la red social recordaron el crimen ocurrido en 1988
Un usuario de Twitter compartió un tweet en que cuestiona si puede reflexionar sobre un vergonzoso hecho ocurrido en su niñez. Los internautas investigaron rápidamente el perfil y llegaron a la conclusión de que se trataba de Shinji Minato uno de los autores del crimen de Junko Furuta.
Al dar con la identidad del tuitero, una ola de mensajes insultantes, de odio e indignación hacia la libertad del sujeto para aparecer en las redes sociales, mientras que su víctima tuvo un trágico final a muy temprana edad.
Pero no existen pruebas concretas de que este sea realmente el perfil de uno de los implicados en el crimen. Aun así la historias de Junko Furuta, su muerte y la impunidad en la que los criminales enfrentaron a la justicia volvió nuevamente a ser tendencia.
El crimen de Junko Furuta
La joven de 16 años era una aplicada y querida alumna, que debido a su belleza y popularidad recibió una invitación de Hiroshi Miyano, su compañero de clase, para salir. Pero Junko lo rechazó y Miyano como miembro de los Yakuza no aceptó el rechazo.
El 25 de noviembre de 1988 Miyano junto a sus amigos Yasushi Watanabe.Shinji Minato y Kamisaku Jo, interceptaron a la joven camino a casa, la golpearon y la escondieron en el sótano de la casa de Minato, el supuesto autor del tweet.
Durante más de un mes Furuta fue víctima de la tortura de sus compañeros, violaciones reiteradas, golpes, quemaduras y cortes. Los criminales la obligaron a llamar a sus padres y decir que estaba donde una amiga para evitar que la buscaran.
Toda la ira de 4 adolescentes fue descargada sobre Junko, incluso invitaban a otras personas a violarla y abusar de ella quien con sus pocas fuerzas solo pedía la muerte. Se estima que más de 100 personas participaron en la tortura.
Finalmente, luego de una mala partida de Mahjong, Miyato descargó toda su ira contra Furuta hasta acabar con su vida. El cadáver fue encontrado en un contenedor lleno de cemento y después del juicio los padres de los jóvenes siguieron culpándola de arruinar la vida de sus hijos.