Amor en tiempos de guerra: La historia de una pareja ruso-ucraniana que se refugia en Serbia

Ella ucraniana, él ruso, los jóvenes se conocieron a través de videojuegos en línea, se enamoraron y cuando se iban a conocer en persona, estalló la guerra.

Mariia Vyhivska conoció el amor por internet, cuando se encontró con Iurii Kurochkin, a través de un videojuego online nació el amor y se volvieron inseparables, aunque cada uno estaba en su país de origen, explica el medio Infobae.

Mariia vivía en Zvyagel, cerca de Kiev, la capital de Ucrania, mientras Iurii vivía en San Petesburgo. Comenzaron los planes de reunirse “Fue hace un año... comencé a organizar mi pasaporte internacional, para visitar a Mariia en Ucrania”, explicó Kurochkin. “Lo terminé en enero y, como saben, la guerra comenzó en febrero y arruinó todos nuestros planes”, explicó.

Las esperanzas de verse en persona se desmoronaban y poco después del inicio de la guerra Zvyagel se mudó a la República Checa. Ninguno de los dos estuvo dispuesto a rendirse y buscando opciones dieron con Serbia, nación que se negó a acatar las medidas contra Rusia y los rusos podían ingresar sin visa.

Reunidos al fin

“Llegué a Serbia el 27 de abril y la esperé durante varios días”, explicó Iurii “Llegó de la República Checa y nos encontramos en la estación central de autobuses”, el encuentro sucedió en Belgrado, la capital de Serbia.

“Hubo este momento de alegría increíble”, dijo Mariia. “Viajé 16 horas y no dormí, no pude dormir. Así que salí del autobús y caí en sus brazos”, recordó. Ambos actualmente tienen 23 años y desde el momento en que se vieron por primera vez, comenzaron a vivir juntos.

Al principio vivieron en un albergue, luego de un tiempo, ahorraron dinero y pudieron arrendar un pequeño departamento en los suburbios, mientras trabajaban en lo que podían y estudiaban online.

El pasado julio, extremistas prorrusos en Serbia, dibujaron una gran Z en el edificio que habitaban, era un símbolo de la invasión rusa, su departamento fue invadido por asaltantes que los atacaron a ambos, también fueron atacados por un grupo de hooligans.

Pero la pareja no se da por vencida y una de las mayores preocupaciones para Mariia es el temor a como la recibirán en su país por su relación con un ruso. Mientras tanto cuenta con todo el apoyo de su familia.