Mujer condenada por no tener relaciones con su marido demanda al Estado francés

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Tras ser condenada por no tener relaciones sexuales con su marido, una mujer de 66 años, que para los medios se hace llamar Bárbara, presentó una demanda en contra del Estado francés ante la Corte Europea de Derechos Humanos (CEDH).

Fue en el año 2019 que los tribunales franceses fallaron en su contra, tras negarse a tener relaciones sexuales con su marido. Para la justicia, la mujer fue culpable de "una violación grave y renovada de los deberes y obligaciones del matrimonio, haciendo intolerable el mantenimiento de la vida en común".

El matrimonio llegó a su fin, y aunque no fue condenada a "pagar" por su falta, actualmente quiere velar por sus derechos y los de todas las mujeres. Por eso, Bábara decidió emprender acciones legales "por lo arcaico y retrógrado del dictamen".

"Es una condena de otra época. Me escandaliza. Lo veo como una denegación de justicia (...) ¿Esta sentencia implica que cualquier mujer casada debe soportar las exigencias sexuales de su esposo cuando ella no esté de acuerdo? ¿El matrimonio da ese 'derecho'?", cuestionó la mujer.

La defensa de Bárbara 

La mujer, quien sobrelleva problemas de salud desde 1992, cuenta con gran apoyo legal y de diversas organizaciones internacionales que velan por los derechos de las mujeres y la igualdad de género.

"Debemos poner fin al tiempo en el que el hombre tenía el cuerpo de su esposa como le plazca. En 2021, el matrimonio ya no puede ser sinónimo de servidumbre sexual", afirmó su abogada, Lilian Mhissen

La abogada además calificó de "sorprendente" que la condena haya sido emitida por un tribunal formado por tres mujeres.

Lo que estas mujeres buscan no es un beneficio económico, sino sentar un precedente en la legislación francesa, ya que según comentan, algunos jueces siguen basando sus dictámenes en el artículo 242 del Código Civil, que indica que "uno de los cónyuges podrá solicitar el divorcio cuando los hechos que constituyan una violación grave o renovada de los deberes y obligaciones del matrimonio sean imputables a su cónyuge y hagan intolerable el mantenimiento del matrimonio. Vida común".

Sin embargo, según cuestionó la Fondation des Femmes, "la Sala Penal del Tribunal de Casación ha abolido el deber conyugal desde la sentencia del 5 de septiembre de 1990" y acusaron que "los jueces civiles siguen imponiéndolo a través de una visión arcaica del matrimonio".