Review: Doom Eternal
La más reciente edición del padre del género finalmente vió la luz, y en Esports13 ya pudimos jugarlo. Aunque (aún) no hemos completado la historia principal nos jugamos la cabeza, y unas cuantas mascarillas o alcohol gel, que Doom Eternal será uno de los mejores juegos de este año. No es perfecto, pero está siendo capaz de soportar el hype que por sí mismo había generado.
Desde ya les comentamos a quienes quieran probarlo que no es necesario haber jugado Doom 2016, aunque sí están relacionados directamente no es lo más importante para un juego que se caracteriza por arreglar cualquier problema a disparos ¿Alguien compra Doom por los diálogos? Aún así es sorprendente la forma en que la acción, mecánicas y jugabilidad sustituyen de manera silenciosa pero efectiva el desarrollo de la trama.
ID Software fue el estudio que desarrolló el juego, prometiendo añadir verticalidad en los movimientos y usos del mapa, herramienta que fue complementada con un apartado de ambientación gráfica extraordinaria, quitando la linealidad que había sido planteada en 2016 y que quizás era un punto a corregir en Eternal. Aquí nos encontramos con plataformas, doble saltos y potenciadores, cosa que en conjunto a la organización de recursos en cada visita al refugio convierte Eternal además en un juego estratégico. ¿Hay algo que estos chicos no hayan hecho bien?
Lamentablemente no tenemos un equipo que nos permita ver los 1000fps prometidos por la empresa, pero no son necesarios para afirmar que el trabajo muestra dedicación y está ejecutado de manera perfecta.
La variedad de armas y enemigos por destruir, sumado al aumento notable de dificultad que presenta Doom Eternal permite que la acción no decaiga en ningún momento. Es un sinfín de criaturas diabólicas siendo destruidas por escopetas, metralletas, motosierras y lanzallamas. Hablando de la construcción de niveles te dejamos un tip: quedarse quieto es una pésima opción.
El OST a cargo de Mick Gordon es justo lo que necesitaba el juego para dejarnos pegados al techo cada vez que aparecía un jefe de nivel. Punto para ellos ya que ni Iron Maiden se atrevió a tanto. Si tomamos una captura de pantalla de cualquier escena del juego estamos frente a algo más oscuro que el Heavy Metal, y nos encanta. Seamos sinceros, Doom tiene mucho, pero muchísimo más contenido y diseño del que esperábamos.
En resumen, estamos frente a un juegazo como Doom Eternal, que viene a refundar los principios impuestos por la misma saga hace 25 años, y que sin duda tiene material para futuras ediciones. Si eres fanático de los shooter no dudes en jugarlo, y si no eres demasiado cercano con el género es un buen primer acercamiento.