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Temperaturas extremas aceleran declive de las aves en el mundo

Por: Constanza Khamis
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Un estudio realizado por investigadores en Estados Unidos, reveló que las altas temperaturas están afectando negativamente a las aves.

Cada año nos estamos encontrando con más frecuentes olas de calor en nuestro planeta. En todos los continentes hemos podido ver como temperaturas extremas han causado estragos, los que han provocado resultados fatales en las zonas afectadas. Pues bien, una nueva investigación de la Universidad de California Davis, revela que este fenómeno está perjudicando agudamente a las aves.

Se trata de efectos negativos en la nidificación y reproducción de estos animales, sobre todo en especies que viven en suelos agrícolas, las que están en bosques o zonas urbanas, no tendrían efectos tan adversos como las antes nombradas, dada las sombras que edificios y árboles otorgan.

Efectos negativos en nidificación de aves

Altas temperaturas afectarían negativamente a aves
Altas temperaturas afectarían negativamente a aves

Lo que hicieron fue analizar más de 150.000 nidos de sesenta especies de aves que vivían en granjas, bosques, praderas y zonas urbanizadas de Estados Unidos durante un periodo de 23 años (1998-2000). 

Los especialistas, que publicaron los resultados en la revista Science, comprobaron que los efectos de las temperaturas extremas en la reproducción de las aves varían mucho dependiendo de su entorno.

Para los científicos es importante reducir las emisiones responsables del calentamiento global, para eso es importante fomentar los "refugios térmicos" y la plantación o el mantenimiento de "manchas o islas" de vegetación natural para asegurar la sombra y aminorar el declive de las aves.

Altas temperaturas afectarían negativamente a aves
Altas temperaturas afectarían negativamente a aves

Además, habrían corroborado que el cambio climático es solo uno de los factores que influyen en el declive de las aves en Estados Unidos, pero también esta lamentable tendencia se estaría potenciando gracias al estrés que viven por la pérdida de sus hábitat naturales.

Las aves que anidan en tierras cultivo tienen menos probabilidades de que sus crías puedan sobrevivir cuando las temperaturas suben, mientras que aquellas que se desarrollan en bosques y zonas urbanas proporcionan áreas de sombras que sirven como un "amortiguador protector" de las temperaturas extremas.

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