Los posters y visuales de este año están a cargo de Tyra Von Zweigberk ilustradora, diseñadora y secretaria general de la entidad entre los años 2015 a 2019.

 

 

Un llamado a reflexionar sobre esos momentos y etapas en las que estamos todavía tirando líneas, en planeación y definiendo lo que queremos hacer. Es el mensaje que quiere transmitir el Consejo Internacional de Diseño para conmemorar nuevamente la acción y obra de esta importante profesión.

A propuesta de Kim Paulsen, vicepresidente de la entidad, entre 1993 y 1995, nace el Día Mundial del Diseño. Eligieron este día, precisamente el 27 de abril, para conmemorar la fundación de la organización, lo cual ocurrió en la misma fecha, pero en 1963. 

Manuel Figueroa, director de la Escuela de Diseño de la Universidad Andrés Bello y exconductor del programa “Esto es Diseño”, nos responde las tres preguntas que mandó el consejo para todos artistas del rubro.

—¿En este espacio de cambios radicales, como debería redefinirse la profesión de diseñador?

“El diseñador no debe redefinirse en cuanto a su expresión, porque el diseñador, nace en un principio y se mantiene hasta ahora como una profesión flexible para poder adaptarse a los problemas que son radicales. El tratar de definir o redefinir al diseñador es prácticamente un sinsentido, si tenemos una profesión que es volátil en alguna medida, que le permite sortear distintas preguntas y conceptos que son en sí mismos difíciles, está el diseñador para darle solución. Su rol es adaptarse a los contenidos y a los contextos nuevos que se le dan de manera permanente”, detalla.

—La evolución puede ser dolorosa, ¿Cómo pueden los diseñadores aprovechar la oportunidad, para imaginar futuros alternativos?

“Para poder crecer se tiene que sufrir crisis, estas nos permiten abrirnos, redefinirnos, revisitar, preguntarnos constantemente por las situaciones que están en el entorno del hombre y aquello que define al hombre si es acaso su entorno. Por lo tanto, cuando los diseñadores tienen que aprovechar una oportunidad, la oportunidad debe ser prestada desde la asunción de los problemas, y estos son desde el presente hacia el futuro, puesto que el presente escribe futuro, ya que este último involucra mirar hacia el pasado”, agrega.

—Diseñadores como guardianes, practicando el rechazo al diseño: ¿Sabemos lo que puede ser hecho, pero sabemos si debería ser hecho?

“El hecho de negar, no significa el no aceptar ciertas cosas que nos permitirían poder solucionar cuestiones que debían estar en el hecho de entenderse como tales, por lo tanto, si el rechazo es simplemente una negación, también es una aceptación de que ese hecho negado existe”, menciona.

Además, quiso agregar algunas palabras para los próximos diseñadores

“El diseñador debe ser un voyerista, un fisgón, debe estar dispuesto a mirarlo todo y si lo mira todo, es capaz de entender el sentido de observación de las cosas. Un diseñador que no sea inquieto por entender el mundo, por comprender ni arriesgarse, ser un provocador, no es una persona que debería ejercer la profesión de diseñador, adicionalmente tiene que ser un tipo con pasión, tiene que ser un tipo que viva como diseñador, un diseñador que no viva como tal, es simplemente un travestismo mal hecho, de alguien que pretende ejercer una profesión que está para servir a otros”, finaliza.