Los gritos desesperados de un gato preocuparon a una mujer. Cuando los siguió, se percató que era una familia de felinos en las tuberías de su hogar. Todo bien en el rescate, sin embargo, esto era solo la punta del iceberg.

Kass es el nombre de esta mujer que se sorprendió cuando se encontró con un gato atrapado en una de las tuberías de su hogar en Providence, Pennsylvania, Estados Unidos. La historia la contó en a través de su cuenta de TikTok (@PhillyFoodGirl). Todo ocurrió cuando apagó su aire acondicionado y escuchó los gritos. 

Siguió el ruido y los maullidos se hacían más cercanos. Al salir de su casa, junto a su pareja, se percataron que había un gato bebé en una tubería exterior del aire acondicionado en su casa. 

Al principio, Kass encontró un pequeño gato que estaba en la entrada de esta tubería, pero este no gritaba. Estaba muy tranquilo como si nada. La preocupación continuó, y aumentó cuando percibieron los gritos desde el interior de este conducto. 

Mas tarde, ella junto a su pareja dejaron algunos alimentos en la abertura de la vía para que estos gatos pudieran salir por su cuenta. Salió uno, luego otro a comer los productos dejados. "Misión cumplida", dijo Kass. Hizo la acción buena del día. 

Pero era solo la punta del iceberg para esta familia, que ya había asumido el rescate total de estos gatos. Al día siguiente, Kass siguió escuchando los gritos. La situación se complicó, porque ahora eran ruidos desesperados. “Pero era solo un tipo diferente de llanto”, comentó en el video. 

“Una mujer de nuestro centro local de animales vive en mi desarrollo, así que… le envié un mensaje de texto y (ella) preguntó si teníamos trampas humanitarias”, siguió explicando la protagonista de esta historia. 

Fue así que la mujer consultada llegó al lugar con una jaula y comida húmeda. Pero nadie salió a buscar la comida. El maullido seguía. 

Fue ahí cuando Kass se dio cuenta que el conducto donde estaban viviendo estos "hermanitos" estaba conectado a una chimenea de gas ubicada en el sótano. Fue hasta este sector de la casa y el grito era más cercano, ahí se pudo percatar que había otro gatito, atrapado en el conducto vertical que une a la chimenea. 

“Sabíamos con certeza que había estado allí por lo menos dos días”, agregó Kass en otro video contando la historia. “Así que (queríamos) sacarlo lo antes posible”, agregó.

Con tijeras y una determinación admirable, comenzaron a cortar la cañería para poder sacar al gatito de esa situación. La idea era que su esposo pudiera agacharse, poder meter la mano y tomarlo. 

“Una vez que lo sacamos, dejó de llorar”, dijo Kass. “Le dimos algo de comer. Tenía tanta hambre, estaba literalmente hambriento. Fue entonces cuando dijimos 'Espera un segundo'. El llanto que escuchamos desde el día anterior y esa mañana no eran los dos (gatitos) que vimos. Fue él quien estuvo atrapado allí todo el tiempo”, agregó nueva mamá de gatos. 

De inmediato llevaron al felino a un centro de animales local, para un chequeo veterinario y obtener un certificado de buena salud. Según lo que comentó Kass, este "minino" tiene cinco semanas y está sano. 

Afortunadamente todo resultó bien y este pequeño que fue bautizado como Murph, vive feliz con su nueva familia. Desafortunadamente, Kass no pudo encontrar a los otros gatitos y su madre. La conclusión de ella, es que se habrían ido a otro lugar para encontrar refugio.