Gabriela Mistral es secuestrada: Vuelve la obra protagonizada por Solange Lackington
Vuelve “Mistral, Gabriela (1945)”, obra dirigida por Aliocha de la Sotta que imagina a la poeta retenida por un grupo de mujeres que intentan cambiar el mundo.
Una ficción en la que la poeta es secuestrada por mujeres que quieren cambiar el planeta. Eso es lo que propone la obra "Mistral, Gabriela (1945), protagonizada por la actriz Solange Lackington, y que regresa a las salas del Centro GAM.
La obra, que tendrá sólo ocho funciones desde el 27 de junio, se plantea como una fantasía; como un intento de hacer un mundo más justo, en donde millones de mujeres no pueden ser felices y que desquebrajan el molde con que se ha presentado a Gabriela Mistral hasta ahora.
"Mistral, Gabriela (1945)" sitúa a la poeta en su rol de cónsul en el Brasil de 1945, cuando se entera que ganó el Nobel. Este dato se lo cuenta su secuestradora, porque la escritora se encuentra encerrada por motivos que su captora va revelando poco a poco.
La secuestradora le relata que lidera un grupo de mujeres que quiere intervenir en su vida para que aproveche su liderazgo y sea un ejemplo de apertura. Quieren cambiar la historia y obligarla a escribir algo muy arriesgado.
El regreso de Gabriela Mistral por Solange Lackington
La actriz Solange Lackington se transforma magistralmente en Mistral, mientras que Valeria Leyton vuelve a ser la líder del movimiento de mujeres. Desde sus diferentes orígenes, edades y miradas, los personajes conversan, con matices de interrogatorio, sobre muchos temas que cruzaron la vida y obra de Mistral, como mujer, intelectual y escritora.
“Es una conversación entre dos mujeres que discuten de historia y de cómo hacemos historia. Aquí no hay poesía, no hay rondas, porque lo interesante es abordar la mujer intelectual que era y abrir otros lugares que están más silenciados de ella”, cuenta Aliocha de la Sotta, directora de la obra.
En escena, para Lackington, la transformación es completa y demora cerca de tres horas en la caracterización con postizos de nariz, peluca y vestuario: “Me encanta dejar la vanidad atrás y sentirme libre de componer. La primera vez que me vi, dije, no soy yo. Empecé a bucear en el mundo de Mistral y me encontré con una mujer con una conciencia social enorme y con un trabajo político muy importante”, afirma la actriz.
La obra, estrenada en GAM el 2019, ha girado con mucho éxito por distintas comunas del país y en el Festival Internacional de Teatro de Manizales en Colombia.