Erika Olivera desclasificó su historia sobre cómo su padrastro la manipuló con el deporte
- Por: Ricardo Pérez
La destacada atleta olímpica de nuestro país, que suma hasta la fecha 12 medallas de oro, 11 de plata y 8 de bronce, Erika Olivera, conversó en este episodio de, “Sigamos de Largo”, sobre lo salvador que fue ella el deporte, refugiándose en la actividad física para dejar de lado sus penas.
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“El correr nace por un tema súper personal donde descubrí que en el trote podía poner mi mente en blanco, echar a volar mi imaginación también, hasta que llegué a una escuela de verano, a los 11 años, en Puente Alto, y es ahí donde conozco la pista atlética”, manifestó la diputada por "Chile Vamos", contándo todo sobre sus primeros pasos en el deporte que la consagró como una de las mejores atletas del país.
En conversación con Maly Jorquiera y Sergio Lagos, Olivera manifestó que en el deporte pudo refugiarse del maltrato que vivió y del entorno donde creció, asegurando que: “El tema de vivir la pobreza es súper duro para cualquier persona, y yo siempre tuve dentro de mi cabeza que yo tenía que salir de ahí. Por otro lado, la población donde yo vivía, Carol Urzúa, estaba muy tomada por el narcotráfico, por la droga. Entonces, para mí también el tema de meterme en algo deportivo fue como escapar. Yo veía como amigos iban cayendo en la droga, muchos de ellos hoy día no están en este mundo”.
Además, el presentador del programa, Sergio Lagos, platicó con Erika sobre la manipulación que vivió en su infancia por su padrastro, quien abusó de ella y la manipuló con el deporte.
“Hoy día en Chile se ha abierto mucho la ventana, diría yo, para que muchas mujeres y muchas personas que sufrieron abuso en su infancia lo puedan dar a conocer. Y dentro de las historias que cuenta cada víctima y cada sobreviviente, claro, efectivamente está la manipulación. Y en mi caso, viví lo mismo. O sea, para poder ir a una competencia o a un entrenamiento, o el poder disfrutar con esta familia atlética que les hablo yo, que fueron mis primeros compañeros de entrenamiento, siempre existía la manipulación”, aseveró la entrevistada, confesando que desde muy chica vivió con temor en su hogar.
Además, la deportista también manifestó la importancia de que cada vez más personas se atrevan a contar su historia de abuso y a denunciar, esto debido a que, en nuestro país, al día, aproximadamente 70 niños y adolescentes sufren de abuso sexual. “Fueron situaciones difíciles, complejas, incómodas, pero que finalmente para mí fueron situaciones que marcaron una etapa de mi vida. Y desde el día que yo decidí hacer público esto, también decidí comenzar un camino nuevo para poder seguir avanzando en la vida, porque de eso se trata también la vida”, agregó Olivera.