Pancho Saavedra participó de inseminación artificial a yegua
- Por: Francisca Oliva
En Lugares que Hablan, Pancho Saavedra y el equipo técnico fue testigo de una reproducción natural y artificial de caballos para mejorar su raza.
Con el equipo de Lugares que Hablan, Pancho Saavedra llegó nuevamente hasta la patagonia chilena para seguir conociendo y descubriendo nuevas facetas de este territorio. En Coyhaique, región de Aysén, nos reencontramos con viejos amigos del programa y conocimos las nuevas técnicas de crianza de animales en este territorio.
Luego de conocer a Boris, dueño de un campo en sector El Fraile, supimos que le ayudarán a mejorar la raza de un caballo, o mejor dicho, le crearán el tipo de caballo que él necesita para las esforzadas labores del campo. Si bien una yegua se demora once meses en parir un potrillo, su animal ya se encontraba en celo cuando grabaron el capítulo en el mes de enero.
“Un hombre en la patagonia sin un buen caballo, por Dios que cuesta”, dijo Pancho Saavedra. Boris aprovechó de contarle la historia de su yegua, la que fue comprada por su padre a un pariente que quería llevarla al matadero. “Mi papá la salvó y venía preñada”, agregó el agricultor.
Pancho Saavedra presencia montura natural
Pancho manejó hasta el Instituto de Investigación Agropecuario, Cri Tamel Aike Inia en Valle Simpson, Coyhaique. Ahí, Boris podrá mejorar la raza y obtener un caballo que tenga más fuerza: “En mi casa el camino es super malo, en invierno hay bajo los 20 grados y yo desde mayo a octubre me lo subo a pata o a caballo, además necesito un pilchero, y un caballo para arar y trabajar”, explicó.
El conductor de Lugares que Hablan se encontró con Mayor Cristián Morales, jefe criadero militar Las Bandurrias. “El ejército despliega anualmente estas estaciones que van contribuyendo a la gente de la zona y está a lo largo del territorio nacional. es un tremendo beneficio y sin costo”, mencionó el uniformado.
Primero, Pancho Saavedra fue testigo de una monta directa, es decir, una relación sexual entre una yegua en celo y un caballo, los que al principio se acercan entre una valla para oler sus feromonas.
Pancho Saavedra ayuda en inseminación artificial
Si bien la yegua de Boris estaba lista para recibir la monta, era riesgoso que un caballo la monte ya que tiene una lesión en la cadera, es por eso que decidieron inseminar de manera artificial.
Para ello obtuvieron el semen de un caballo percherón, una especie robusta y con mucha fuerza para mover carga, a través de una vagina artificial con la cantidad precisa de agua y aire.
Pancho dijo que nunca había presenciado una inseminación artificial. “Esto es espectacular para nosotros”, dijo Boris, puesto que es una ayuda a los agricultores de la zona que no tienen los medios para comprar caballos que puedan enfrentar agotadores tareas del campo.
En el procedimiento de inseminar a su yegua, Pancho colaboró con la limpieza genital de la criatura. “Que la gente que está viendo en la casa lo vea con altura de mira. Nada de hacer memes”, advirtió Pancho sobre este proceso.
Revisa aquí este increíble momento de Lugares que Hablan.