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Chile se prepara ante los riesgos de los nuevos escenarios digitales

  • Por: Christian García
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Cuando se habla de metaverso, solo se escucha un eco lejano, como si se tratara de una película de ciencia ficción o un escenario al que es difícil llegar. Lo mismo pasó con los celulares, Internet y las redes sociales, pero hoy nadie podría imaginar su vida sin WhatsApp, sin Instagram y sin Google. 

La realidad inmersiva del metaverso puede parecer lejana todavía, pero es un hecho que se acerca a pasos rápidos y agigantados, por lo que necesitamos pensar, regular y analizar cómo se insertará nuestra sociedad en lo que parece ser la plataforma de relaciones sociales, laborales y educacionales del futuro.

“Estamos enfrentando una nueva era con oportunidades gigantescas, pero con amenazas del mismo calibre. Buscamos ser el primer país que legisle para asegurar el bienestar, la autonomía y la libertad de las personas en este espacio” aseguró Guido Girardi, vicepresidente ejecutivo de la Fundación Encuentros del Futuro (FEF), quien además recordó los errores cometidos frente a la implementación del Internet en los años ochenta: “Se presentó como una tremenda herramienta de conocimiento, pero por no ser regulado a tiempo, terminó siendo coartada por grandes empresas que transformaron un espacio público en un espacio privado, de difícil acceso y lleno de desinformación”.

Por ello, Congreso Futuro (a través de la Fundación Encuentros del Futuro y la Comisión de Desafíos de Futuro del Senado de Chile) junto al Laboratorio de Inteligencia Artificial, Neuroderechos, Plataformas Digitales y Metaverso (LIANM), asumieron el desafío de liderar en la materia y organizaron el primer Seminario Internacional “Oportunidades y Desafíos del Metaverso”, que durante el jueves 16 y viernes 17 de marzo reunió a más de 30 especialistas, provenientes de siete  países -incluído Chile- con el objetivo de transparentar a la sociedad y autoridades, los anhelos y preocupaciones propias del desarrollo de esta tecnología.

El presidente del Senado, Juan Antonio Coloma, señaló que “este seminario ha permitido entender este proceso de la nueva realidad virtual, que pasará con las oportunidades tremendas en materia educacional, democrática y económica; y las dificultades con todas aquellas cosas que -de una u otra manera- rompen la identidad de las personas (…) Una cosa es mirar lo que pasa y la otra es involucrarse, es estudiar los temas –como este seminario- con el fin de proponer, desde ahí, una legislación que apunte a como cuidar esos valores comunes a la identidad humana y aprovechar la oportunidades que nos presenta esta nueva forma de ver el mundo”.

Con el objetivo de amplificar el discurso y sumar a la mayor cantidad de personas al debate, el evento tuvo tres modalidades de participación. Para los que quisieron asistir de manera presencial llegaron hasta la sala de sesiones de la Cámara de Diputadas y Diputados de Chile, aunque también se transmitió vía streaming por las plataformas de Congreso Futuro y sus redes sociales. En esta ocasión se implementó una tecnología metaversal que permitió a los oyentes participar, navegar, recorrer e incluso bailar en un escenario simulado -creado mediante avatares- descubriendo también las posibilidades de movimiento que proporcionan aplicaciones inmersivas como Spatial.

 

Comprensión de la nueva tecnología

Las charlas, enfocadas a público general, estuvieron pensadas para la comprensión de la nueva tecnología, sus posibles amenazas para infantes, la salud mental y marcos regulatorios, pero también se abordaron desafíos y oportunidades para la economía, la medicina e incluso el desarrollo de avatares que funcionen como alter ego que permitan potenciar talentos y/o habilidades que las personas no muestran en el mundo real. 

Para Carolina Plaza, directora ejecutiva de Metaverso Legal, e integrante del LIANM, este evento marcó un precedente al plantear las oportunidades que proporciona dicha tecnología y destacó las posibilidades en materia educacional, con las que podemos ayudar a los jóvenes. “Si bien estamos tan avanzados en distintos ámbitos, la educación sigue siendo un punto fundamental de crecimiento porque, finalmente, seguimos en la misma forma de educar del año 1900. La capacidad de aprendizaje es mucho mejor en un proceso inmersivo. Por otro lado, tenemos muchas oportunidades en la salud, en que se puede hacer telemedicina y también tener simuladores. Asimismo, en materia legal y la minería”.

En ese sentido, el abogado y profesor titular de la Pontificia Universidad Católica de Chile, Carlos Amunátegui, expositor de la última jornada del evento, explicó que es necesario regular el metaverso desde su génesis porque está constituido y opera como espacio privado. “Lo que queremos es garantizar en el metaverso los mismos derechos que tenemos en el mundo real, que nos tomó siglos alcanzar y aún así nos falta. Queremos implementar -en este nuevo espacio- la misma democracia representativa, como una plaza pública para todos y todas y no la prerrogativa de una empresa privada que podría decidir arbitrariamente el incluirnos o no”.

El presidente de la comisión Desafíos del Futuro, senador Francisco Chahuán, señaló que este “trabajamos con 7 países quienes se pusieron a disposición para definir el metaverso, estudiando las implicancias desde el punto de vista de lo bienes jurídicos protegidos y también cuáles son las proyecciones en relación a su aporte al desarrollo económico, político, social en el tiempo en que se está redefiniendo la frontera entre lo real y digital”.

“Este seminario nos posiciona como unos de los países, una Comisión y una Fundación que son pioneros en el mundo al socializar el Metaverso con sus oportunidades y por supuesto cuestionarnos sobre sus implicancias jurídicas”, agregó el senador Chahuán.

Este seminario reunió alrededor de 300 personas presenciales en la Cámara de Diputadas y Diputados, más de cuatro mil conexiones en línea y 1.500 usuarios en el Metaverso. Nació al alero del LIANM que se presenta como una entidad que invita a la discusión y generación de iniciativas abiertas a la participación de actores diversos, en una lógica exploratoria y de promoción de la inteligencia artificial y el uso de tecnologías inmersivas al servicio de la salud, el desarrollo humano y planetario, en alerta permanente frente a la opacidad algorítmica, la proliferación de noticias falsas, la naturalización de discursos de odio, la vulneración de la libertad y la autonomía de las personas mediante la manipulación intencional de creencias y preferencias, que tienden al fraccionamiento de la sociedad.

La coordinadora del LIANM, Isabel Cornejo, PhD en derecho y académica de la U. Autónoma de Chile, señaló que “continuarán trabajando en la concientización social y a los entes reguladores sobre la necesidad de legislar. Para ello contamos con la academia y el mundo empresarial. Con este seminario estamos realizando un diagnóstico, que con otras actividades, se debe convertir en una declaración multisectorial que será extendida a todos los actores relevantes que puedan asegurar una nueva ley para asegurar una evolución tecnológica para todas y todos”.

 
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