En Bienvenidos conversamos sobre el complejo escenario de salud mental por el que atraviesan cientos de personas en nuestro país.
La catástrofe sanitaria, económica y social que ha provocado más de un año de confinamiento, restricciones de movilidad y económicas no sólo ha tenido costos en la salud física y moral de las personas, sino que un alto impacto su psiquis.
Tal es el caso de Claudia Montecinos, emprendedora que es parte de los cientos de chilenos que hoy viven en carne propia los efectos de una pandemia, que desde el punto de vista psicológico ha sido tremendamente devastadora y que ha provocado un alza de hasta un 700% en la venta de algunos fármacos asociados al tratamiento de la salud mental.
“Psicológicamente hay días que amanezco sin ganas de nada y lo único que quisiera es dormir, pero de repente te llega un mensaje y te dice no se puede salir una cajita de 15 y me levanto con esas mismas ganas de haber vendido una cantidad de 30 cajas”, expresó Claudia.
Juan Carlos Alvear, padece depresión, un diagnóstico alcanzado tras la pandemia y que se agudizó con las consecuencias externas que la crisis sanitaria provocó. “Tengo una pyme y 31 de marzo se nos acabó el contrato, no podemos seguir con los proyectos. Ahora la pyme tampoco puedo hacer envíos porque no son productos de primera necesidad”, señaló. Tras su despido sólo le quedan 300.000 pesos para vivir y para mantenerse sano debe costear un tratamiento psicológico que abarca un tercio de sus ahorros.
Sergio Schilling, psicólogo, aseguró con respecto al tema que “las personas las estoy viendo más un estado de fase de agotamiento, fase de abatimiento si se quiere, porque los recursos de la primera fase de alerta que fue el año pasado empieza a perder protagonismo y empieza a ganar protagonismo sintomas más del elemento más puramente depresivo (…) donde hay sentimientos de culpa e inutilidad son claros de la constelación de los síntomas de los episodios depresivos”.
Estudios realizados durante el 2020 evidenciaron que casi un 50% de los adultos encuestados evaluó que su estado de ánimo es peor o mucho peor desde que se inició la pandemia, un 55% dijo sentirse más agobiado y en constante tensión y, por último, más de un 48% declaró que tenía problemas graves para dormir.
Es por esto, que a mediados de 2020 el Ministerio de salud lanzó el programa “SaludableMente” una línea de ayuda para quienes sufren las consecuencias de las cuarentenas, sin embargo, el sistema ya no da abasto.
“De políticas de salud mental, no se hablo poco hasta el momento de justificar las vacaciones. Principalmente se ha preocupado la salud es del cuerpo, del soma, de cómo el cuerpo tiene que ser protegido en esta situación de cuarentena (…) y eso tiene efectos porque nosotros somos una integración de ambas cosas, somos una mente dentro de un cuerpo”, declaró el psicólogo.
Síguenos en