Los resguardos que tomó “Bailando por un sueño” por el coronavirus

La producción del programa de baile decidió poner en marcha una serie de medidas a modo de prevención y así evitar contagios.

El coronavirus COVID-19 pasó a la fase 4 en Chile, lo cual significa que existe circulación viral y dispersión comunitaria de la enfermedad. Por lo mismo, las autoridades anunciaron diversas medidas para contener la propagación como el cierre de fronteras por 15 días.

 

 

“Bailando por un sueño” no quedó ajeno ante este escenario y también tomó resguardos ante la situación que afecta al país. Así lo contó Eduardo Cabezas, productor ejecutivo del programa al diario “La cuarta”.

El viernes pasado, se definió que todos los camarines utilizados para el estelar cuenten con lo necesario para evitar contagios: alcohol gel, mascarillas y guantes. Se trata de implementos que marcarán todos los lugares donde se mueva el equipo que trabaja en este proyecto.

Asimismo, todos los integrantes que son parte de “Bailando por un sueño” serán vacunados contra la influenza. “La idea, básicamente es generarles mayores defensas a los miembros de la producción, bailarines, coreógrafos o celebridades”, afirmó Cabezas.

A esto se suma el hecho de que, a partir de este lunes 16 de marzo, el programa no contará con público y no se podrá saludar con contacto físico. Además, se hará un seguimiento a todos quienes son parte de la realización y así detectar de inmediato el surgimiento de algún eventual contagiado.

 

“Hay fundaciones que tienen que ver con niños y otras con adultos mayores. Entonces, tenemos que tomar los resguardos. El apoyo sigue intacto, pero es recomendable que lo vean desde sus casas”, finalizó el productor conocido en el medio como “Fido”.

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