Publicidad

Síndrome del corazón roto: Los efectos de un mal amor

  • Por:
Compartir
Publicidad

Una persona que está pasando por la experiencia de desamor también puede verse afectada físicamente a causa del estrés que producen sus propias emociones.

Diversas investigaciones han demostrado que el estrés puede producir una serie de efectos dañinos en la salud a corto, mediano y largo plazo. Por ejemplo, el estudio estadounidense JAMA Network Open publicado en marzo de este año, reveló que las personas con altos niveles de estrés tienen más probabilidades de sufrir un deterioro de la función cognitiva, lo que afecta a su capacidad de recordar, concentrarse y aprender cosas nuevas. Asimismo tienen más probabilidades de presentar factores de riesgo cardiovascular no controlados y un estilo de vida poco saludable.

Hugo Huerta, psicólogo especialista en Trauma Complejo del desarrollo, explica que esto ocurre ya que la exposición a situaciones altamente demandantes emocionalmente aumenta los niveles de cortisol y en efecto puede alterar diferentes funciones de nuestro organismo.

La sociedad tiende a asociar el estrés sólo a problemáticas en el trabajo, a la aceleración de la vida en general, o incluso al tráfico de vehículos en la ciudad. Sin embargo, una experiencia de desamor también provoca altos niveles de estrés en las personas, por lo que puede generar una serie de inconvenientes tanto en nuestra salud mental como física”. Argumenta el especialista.

¿Cómo se relaciona el estrés con el síndrome del corazón roto?

El psicólogo, explica que el síndrome del corazón roto es una afección cardíaca que a menudo se produce en situaciones estresantes y emociones extremas.  Por lo que el término de una relación de pareja sí podría ser la causante de este síndrome, sin embargo, aclara que todo va a depender de las circunstancias en que la relación llegó a su término, como por ejemplo: infidelidades, violencia física o psicológica o manipulaciones.

Un estudio publicado por la revista Journal of American Society of Echocardiography -donde los científicos a cargo de la investigación analizaron durante 4 meses a 52 pacientes que sufrieron la miocardiopatía de Takotsubo o síndrome del corazón roto- reveló que este tipo de situaciones pueden generar que algunas partes del corazón se llenen de pequeñas fisuras que hacen que el músculo pierda elasticidad y que no se contraiga correctamente.

Si bien por lo general las heridas cicatrizan los días posteriores, en algunos casos, los daños en las personas podrían ser de larga duración o incluso irreversibles. Por lo que el llamado es estar atento a las señales de alerta post término.

“Cariño malo"

El psicólogo Hugo Huerta, cuenta que en su experiencia como terapeuta acompañando a personas en sus procesos post quiebre, ha podido observar cómo la experiencia del desamor puede causar graves estragos en la vida de las personas y afirma que esto no sólo se limita a los sentimientos relacionados directamente al quiebre en términos románticos, sino que también extiende sus efectos a dimensiones familiares, económicos, judiciales, de proyectos de vida, entre otros aspectos importantes.

“Dependiendo del perfil psicológico de cada persona, el afrontar un quiebre amoroso puede también llegar a ser causa de episodios depresivos, crisis de ansiedad, ideaciones o intentos de suicidio. Por todas estas razones el término de una relación de pareja es un tema que afecta a la salud mental y que por tanto debiera ser abordado con toda seriedad y multidisciplinariamente, con el apoyo de psicólogos, médicos e incluso abogados y trabajadores sociales”. Enfatiza el especialista en Trauma Complejo del desarrollo.

El camino de la sanación

La primera recomendación que entrega el psicólogo es no quedarse con el cliché de que "el tiempo lo cura todo", porque a veces el paso de los días puede ir agravando la situación o los síntomas de una persona ante una determinada experiencia o enfermedad.

Del mismo modo Hugo Huerta indica que “una herramienta muy efectiva para quienes sufren el síndrome del corazón roto, además de una oportuna evaluación y tratamiento médico, es buscar contención en sus redes de apoyo y evitar aislarse por completo. Así como también tomar todas las medidas posibles de autocuidado, que le permitan bajar los niveles de estrés emocional que la experiencia del desamor les puede generar”. Aconseja el especialista en Trauma Complejo del desarrollo.

Por lo señalado anteriormente, tener el corazón roto es un problema de salud que hay que tomar con la importancia que esto tiene, por lo que el llamado es que las personas aborden este proceso de desamor como un problema de salud mental y física, de manera de considerar buscar ayuda profesional médica y psicológica, en el caso que sea necesario.

Publicidad