"Tenemos derecho a mostrar nuestros cuerpos": Loreto Valenzuela sobre estándares de belleza en mujeres mayores

En el último capítulo de "La Divina Comida", Loreto Valenzuela compartió su reflexión con respecto a la belleza que se le impone a las mujeres adultas. 

Junto a las demás invitadas del programa de Chilevisión, Pepi Velasco, Elena Muñoz y Magdalena Max-Neef, la actriz recordó cuando fue parte de una campaña de lencería que buscaba visibilizar todo tipo de cuerpos. 

"Estoy en esta cosa en la vida de que las mujeres mayores somos guapas, tenemos derecho a mostrar nuestros cuerpos, que no tenemos por qué estar siempre escondiéndonos y tenemos cosas que decir", comenzó diciendo Valenzuela. 

Siguiendo esta línea, contó que entre la diversidad de cuerpos que mostraban habían desde personas tatuadas hasta mujeres con más edad. "Se trataba de eso, el derecho a sentirte bonita y eso fue lo que me gustó", confesó. 

“Me carga esta sensación de que las mujeres sienten que de repente desaparecen, ya son desechables y para lo único que sirven es para criar nietos”, reveló detrás de escena. 

Al mismo tiempo, Loreto comentó que realizar la sesión de fotos fue un desafío para ella. “Decir yo tengo este cuerpo, que tiene estos años y que no por eso yo lo escondo, sino que aquí está y yo lo muestro”, aseguró.

A raíz de esta reflexión, la actriz siguió con su crítica a los estándares de belleza que se le imponen a las mujeres mayores: “Creo que la diversidad, creo que hay que salir de la dictadura de los medios, de cierto tipo racial y matemático de belleza”.

Así también, confesó que cuando le dicen que es guapa le dan ganas de hacer un hoyo y esconderse. "Porque digo, ¿por qué me estás webeando de esta manera? Cuando yo sé que soy fea”, señaló.

Lo que inmediatamente desató la reacción de sus compañeras, que lo negaron. Fue entonces que hablaron íntimamente sobre este tipo de cosas que quedan marcadas en sus vidas. Por su parte, Magdalena señaló que siempre tuvo problemas con la gordura y Pepi bromeó que antes era "peluda, bigotuda y cejona, pero era bien alegre". 

Finalmente, Loreto señaló la gracia de llegar a esa edad, porque cuando eran más jóvenes no podrían admitir sus imperfecciones.