Carolina Paulsen revela terrible situación de acoso sexual: Fue salvada por Begoña Basauri

La actriz recordó el angustiante momento que vivió en Brasil mientras se encontraba de vacaciones con Begoña.

Carolina Paulsen fue una de las invitadas en el programa Podemos Hablar, donde recordó el angustiante momento que le tocó vivir durante una fiesta en Brasil en un pueblo llamado Pipa. Inicialmente comentó que una amiga le había advertido sobre los hombres locales.

“Ojo, porque es un pueblo súper cosmopolita; si vas a pichar, pincha con europeos, porque los brasileños en esa zona son un poco rudos”, le dijo su amiga. Durante su estancia allá “estaban celebrando el día de Pipa, una cosa así, y de repente se empieza a acercar gente, comenzamos a conversar, y llega un brasileño, así grandote”.

“Me empieza a hablar en portugués, y yo no sé nada de portugués, yo le hablaba en español todo el rato, entonces me dice si quiero tomar un trago muy potente. Yo dije ya po, tomemos”, explica Paulsen, quien además detalló que advirtió al sujeto sobre el cáncer de mama que había sufrido.

“Yo le había dicho toda mi vida, que me había dado cáncer de mama, para no sorprender al hombre, si es que llegáramos a intimar en algún momento. Yo le empiezo a contar mi historia, porque hay secuelas corporales, pero no con la sensación de que nos vamos a ir a acostar después, no, soy transparente po weon”, aclaró.

La grata conversación se convirtió en un momento de terror

Luego de mucho rato hablando, Begoña le dice que se va a ir a descansar, ella también decidió volver al hotel y el brasilero la acompañó en el taxi, esperando que solo la dejara y siguiera su camino.

“Yo le digo yapo, chao, para que se fuera en el taxi de vuelta, y dice, no, yo las voy a dejar a la cabaña”, recuerda. “Yo le digo ‘yapo, después te tienes que ir’. Fuimos a la cabaña, la Bego se durmió y digo, ya, listo, que te vaya bien, yo me quiero dormir también”, agregó.

“Es que usted tiene que estar conmigo”, le dijo el hombre. “Cómo voy a estar contigo, quiero irme a acostar. De hecho, cuando alguien es muy invasivo, no tengo problema (en decirle) qué te pasa loco. Pero acá era tremendo, y él insistía e insistía“, detalló Carolina

“Me meto rápidamente (a la cabaña), cierro, no sé cómo cerré con esa rapidez, la adrenalina de decir ‘aquí me tengo que proteger'”, dice, pero el brasilero comenzó a golpear la puerta y gritar para que le abriera, hasta que despertó a Basauri.

“La Bego se despierta y se manda un grito, ‘¡Ándate ctmre!’ Y nos salvó la vida básicamente, porque después de ese tremendo grito, grande, de defensa, we*n nunca más, silencio, pero quedamos atacadas. Al día siguiente no estaba, dormí súper mal”, finalizó el relato.