Publicidad

Día Mundial para la Prevención del Suicidio: 5 indicadores claves a considerar en torno al riesgo

  • Por: Tatiana Hernández
Compartir
Publicidad

Este 10 de septiembre se conmemora el "Día Mundial para la Prevención del Suicidio". Y es que hace 50 años, el suicidio en Chile era un tema poco discutido en la esfera pública.

Pero en la actualidad, en cambio, existe un Plan Nacional de Prevención de Suicidio elaborado el 2013 que se desarrolla a través de los gobiernos regionales, y hoy se releva este tema adhiriendo al “Día Mundial para la Prevención del Suicidio”, establecido por la Organización Mundial de la Salud en 2003.

Sin embargo, es necesario que a las medidas preventivas ante el suicidio se le sume el compromiso de toda una sociedad que debe estar alerta frente a las señales de quien puede estar en riesgo de quitarse la vida.

“Cuando alguien menciona que tiene pensamientos suicidas o ideas de morir, resulta bastante difícil saber cómo responder. Todos queremos hacerlo de la mejor manera posible, pero es complejo saber qué hacer o qué decir”, explica María Ignacia Sandoval, psicóloga y coordinadora del Programa Contigo en el Recuerdo de Parque del Recuerdo.

Día Mundial para la Prevención del Suicidio: 5 indicadores claves a considerar en torno al riesgo suicida

1. Cambios en el comportamiento: la persona se aleja de amigos y de la familia; deja de hacer aquellas actividades que antes disfrutaba, puede experimentar un aumento en el consumo de alcohol o drogas y cambios en los hábitos de sueño.

2. Expresa desesperanza o extrema tristeza: habla de querer morirse, de sentirse atrapada o tener pensamientos sobre la muerte o el suicidio. Podrían decir cosas como ‘estoy teniendo pensamientos muy oscuros’, ‘las cosas estarían mejor sin mí’, ‘a veces me gustaría dormir para siempre’, ‘ruego no despertarme’, ‘ya no quiero vivir esta vida’. A veces puede que ni siquiera sea tan obvio, y que genere publicaciones extrañas por redes sociales o Whatsapp que no parecen del todo correctas.

3. Preparativos para el suicidio: puede hablar o elaborar planes específicos sobre cómo llevar a cabo el suicidio y más aún, empieza a despedirse de personas cercanas, regala pertenencias personales o hacer arreglos para el futuro que sugieren que están preparando su despedida.

4. Cambios emocionales: se le ve ansioso, agitado y extremadamente inestable y con depresión.

5. Conductas de riesgo: participa en actividades peligrosas o autodestructivas sin preocuparse por las consecuencias como conducir de manera temeraria, ser impulsivo o manipular objetos peligrosos.

Día Mundial para la Prevención del Suicidio: “Pregunte, pero no minimice el problema”

“Si no se está seguro de que la otra persona está pensando en ideas de muerte, se aconseja preguntar directamente. Confíe en su instinto: si algo no parece correcto, es porque probablemente no está bien, observa la psicóloga.

Y aclara que “preguntar si alguien tiene tendencias suicidas no genera ideas suicidas. Las personas encuentran un alivio cuando alguien les ayuda a abrirse y hablar directamente sobre algunos sentimientos que pueden llegar a aterrarles y sentir mucha soledad. Si no están pensando en eso, lo dirán inmediatamente”.

Por el contrario, si se confirma que está con ideas suicidas “detenga todo lo que está haciendo y dele tiempo. Llévelo a un lugar tranquilo, como una caminata y muéstrese presente. Nada de estar viendo las redes sociales mientras conversa. Tampoco es bueno posponer la conversación; puede que no sea fácil, pero podría salvarle la vida” añade la psicóloga.

Se pueden decir cosas como “quiero que sepas que no estás solo. Aun cuando lo que estás pasando es malo, estoy aquí para ti”, “sé que todo se ve horrible ahora, pero las cosas pueden mejorar. Déjame ayudarte a que veas de nuevo la vida con color”. O simplemente darle un abrazo.

Es importante no minimizar el problema, ni decir frases como “no es tan malo”, “mañana te sentirás mejor” o “no seas tonto, no digas esas cosas”. Mejor es hacerle saber que entiendes cómo se sienten y que juntos saldrán de eso.

Del mismo modo, es fundamental animar a la persona a buscar ayuda profesional. Y si se advierte de riesgo inminente, lo mejor es llamar a los servicios de emergencia (Bomberos o Carabineros) y, de ser posible, mantener a la persona dentro de un entorno seguro.

Publicidad